BARCELONA, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona empezará este lunes las obras para convertir la calle Major de Sarrià en una plataforma única, en que se permitirá el paso de vehículos a velocidad reducida.
En un comunicado este domingo, el consistorio ha explicado que se pasará del estado actual --aceras y calzada con aparcamiento lateral-- a una plataforma única "con una franja central al mismo nivel de las aceras".
Las aceras serán más anchas, se eliminará el espacio de estacionamiento y se restringirán las zonas de carga y descarga con la intención de dejar un espacio más amplio para los peatones.
El proyecto comprende el espacio entre el paseo de la Bonanova y la calle del Institut Químic de Sarrià, además de la calle del Pare Miquel de Sarrià, lo que supone una superficie total de 3.498 metros cuadrados.
El consistorio prevé que las obras se alarguen durante diez meses y ha establecido un presupuesto de 2,6 millones de euros.
En la esquina con la avenida de la Bonanova se construirá una acera ancha que convertirá el espacio en una pequeña plazuela que alargará la plaza de Sarrià.
Con esta remodelación en la zona, el Ayuntamiento pretende "dar más protagonismo al peatón, consolidar su carácter de calle de casco antiguo y mejorar la calidad urbana del espacio público".
CAMBIOS EN EL TRÁFICO
Al finalizar las obras, las calles Químic de Sarrià y Margenat cambiarán de sentido "para rebajar el tráfico en este tramo, ya que es un camino escolar y se pretende mejorar la seguridad de los peatones".
Este cambio afectará a la línea de bus 130, que pasará por la calle de Margenat, y tendrá una parada cerca del CAP de Sarrià.
También habrá nuevas paradas de autobús en la Via Augusta, en General Vives y al inicio de la calle Major de Sarrià.
Durante la remodelación, la calle estará cerrada al tráfico --excepto vados y peatones-- entre la calle Santa Magdalena Sofia e Institut Químic de Sarrià.
El contenido de esta noticia está elaborado en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona
