Presenta la hoja de ruta que cierra la Conferencia Mundial celebrada en Barcelona
BARCELONA, 20 May. (EUROPA PRESS) -
Unesco ha pedido cambios "urgentes" en el mundo de la educación superior para garantizar un acceso equitativo, bien financiado y sostenible a las universidades, y profundizar en el aprendizaje holístico y la interdisciplinariedad.
Así consta en la hoja de ruta 'Más allá de los límites. Nuevas formas de reinventar la educación superior', propuesta para la Conferencia Mundial de Educación Superior celebrada en Barcelona hasta este viernes en el recinto Montjuc de Fira de Barcelona, y presentada por la subdirectora general de Educación de Unesco, Stefania Giannini.
Giannini ha manifestado que "el cambio urgente es un imperativo ético", y ha advertido de que las transformaciones a menudo generan resistencias.
Unesco considera que la educación es un "derecho que debe ejercerse a lo largo de todo el ciclo vital" e identifica que las instituciones de educación superior tienen tres misiones: producir conocimiento, educar a las personas y la responsabilidad social.
Bajo ese marco, propone seis grupos de principios clave: en primer lugar, la inclusión, equidad y pluralismo en la educación superior; en segundo, la libertad académica y participación.
El tercer principio es la indagación, pensamiento crítico y creatividad; el cuarto es la integridad y la ética; el quinto es el compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social; y el sexto es la excelencia a través de la cooperación en lugar de la competencia.
Siguiendo esa guía, la hoja de ruta pide dejar de considerar la educación superior como algo elitista y discriminatorio y pasar a hacer posible el derecho de las personas a acceder a ella de forma "equitativa, bien financiada y sostenible".
También propone pasar de un enfoque restrictivo en la formación disciplinar a una experiencia de "aprendizaje holística del estudiante" que se produzca a lo largo de la vida.
Las instituciones deben sustituir los llamados silos disciplinarios por la interdisciplinariedad, y conectarse entre ellas para lograr un "sistema integrado con diversidad de programas".
Por último, la hoja de ruta opta por pasar "de un modelo industrial de enseñanza a experiencias de aprendizaje superior pedagógicamente informadas y tecnológicamente enriquecidas", gestionadas por los propios alumnos.
SITUACIÓN ACTUAL
El documento también analiza el momento actual de la educación superior, constatando "cambios sustanciales" desde la última Conferencia en 2009 motivadas por un entorno global cambiante.
Así, se enumeran el cambio climático, la persistencia de los conflictos armados, la desigualdad de ingresos y el "declive general de la democracia" como amenazas a la estabilidad del sistema.
Persisten "graves disparidades" entre los matriculados, por mucho que en los últimos años se haya expandido el número global y se haya internacionalizado la educación superior.
Los enfoques de financiación están cambiando, con mayor dependencia de los mecanismos basados en rendimiento y la introducción de planes de matrícula gratuita en varios países.
PARLAMENTOS
Giannini ha apuntado que el documento "es de trabajo y está vivo", porque se puede nutrir de aportaciones en los próximos tiempos --se publicará una versión actualizada en 2023--, y ha señalado que en 2027 se celebrará otro foro para analizar el grado de evolución y cumplimiento.
El secretario general de Universidades del Gobierno, José Manuel Pingarrón, ha señalado la importancia de "no dejar a nadie atrás" porque la educación superior debe reconocerse como un derecho universal, implementando políticas para la equidad en el acceso a la universidad a través de becas.
A su vez, la consellera de Investigación y Universidades de la Generalitat, Gemma Geis, ha agradecido a la Unesco que haya escogido Barcelona para celebrar la Conferencia y ha opinado que las universidades "deben seguir jugando un papel clave en la defensa de los valores democráticos" que ella ve en riesgo: los derechos fundamentales, libertades, diversidades, culturas y lenguas.
