Absuelto por falta de pruebas el acusado de matar a puñaladas a un joven en una discoteca

Actualizado: martes, 27 marzo 2012 20:43

TARRAGONA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Tarragona ha absuelto al acusado de matar a puñaladas a un joven tras una pelea multitudinaria en el exterior de una discoteca de Reus (Tarragona) en julio de 2010 por falta de pruebas y ninguno de los testigos le culpó durante la vista oral.

El juez ha considerado en la sentencia: "Desde luego, no existe prueba directa para reprochar culpabilísticamente al acusado de la muerte del Jaron Eder L., pero es que tampoco la hay indirecta".

El 31 de julio sobre las 5.30 horas, el acusado, Wascar J., participó en una reyerta en la que formaron parte unas 30 personas --imputadas en otros dos procesos-- en las inmediaciones de la discoteca 'Coco Maluco' en la avenida Pere El Ceriminiós de Reus que se gestó en el interior del local y que inició su hermano Wagner J.

La pelea terminó con la muerte de uno de los amigos de Octavio I., la víctima Jaron Eder L., que fue agredido en dos ocasiones con un cuchillo en una rotonda cercana al local por uno de los chicos que participó en la reyerta y que iba en una moto y casco negro.

Ante estos hechos, ninguno de los testigos declaró durante la vista oral que vieran al acusado, Wascar J., subir a su ciclomotor ni ir armado con un puñal e incluso algunos apuntaron que regresó a casa con su novia, si bien éste admitió ante el juez que formó parte de la pelea negando que fuera el autor de los hechos.

Además, los testigos subrayaron que el encausado solía utilizar un caso y una moto amarilla y no negra, y dos testigos inculparon a otro joven colombiano, a quien decían haber visto encima de una moto y cerca de la rotonda.

Tras el suceso se generaron rumores que apuntaban al acusado --en libertad provisional desde el sucesos--, pero el juez ha considerado que no tienen relevancia y no aportan "ningún dato sobre la autoría del hecho".

La falta de pruebas forzó al magistrado a disolver anticipadamente el Jurado popular que juzgaba al procesado y ha concluido con su absolución valorando el principio "in dubio pro reo" --ante la duda a favor del reo-- y su presunción de inocencia.

El Ministerio Fiscal le acusaba de un delito de homicidio y solicitaba para él una pena de hasta 13 años de prisión además de 160.000 euros en indemnizaciones para los familiares del fallecido.