BARCELONA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las personas concentradas en la plaza Sant Jaume de Barcelona esperando la salida del nuevo presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, tras la toma de posesión han pitado y abucheado a su salida de la ceremonia a los políticos contrarios a la independencia y a los representantes del Gobierno y del Ejército en el acto.
Concretamente, buena parte del medio millar de concentrados han silbado al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y a la delegada del Gobierno en Catalunya, Llanos de Luna, que asistían en nombre del Ejecutivo central, y también al inspector general del Ejército, el teniente general Ricardo Álvarez-Espejo.
Al primer secretario del PSC, Miquel Iceta, lo han recibido primero con pitos y han acabado gritándole "Que baile, que baile", en referencia a los bailes que popularizó durante la campaña electoral del 27S.
También se ha llevado una bronca el exconseller de Interior y candidato de Unió a las elecciones catalanas, Ramon Espadaler, a quien han llamado "botifler".
Además de los representantes políticos e institucionales, el público ha pitado y abucheado la salida del Palau de la Generalitat del presidente de la patronal Fomento del Trabajo, Joaquim Gay de Montellà.