Álvarez (UGT) aboga por que los actores del diálogo social vayan con los "deberes hechos" al Gobierno

Europa Press Catalunya
Actualizado: jueves, 22 octubre 2009 14:42

BARCELONA 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de UGT de Catalunya, Josep Maria Álvarez, se mostró hoy partidario de que sindicatos y empresas negocien los aspectos del diálogo social para poder llevarle los "deberes hechos" al Gobierno.

Aunque reconoció que el Ejecutivo debe entrar en escena en el diálogo social, ya que muchos de los acuerdos requieren también de su autorización, consideró que es mejor que organizaciones sindicales y patronal conversen y le presenten sus acuerdos.

Ante la posibilidad de que se retome el diálogo en Madrid, dijo ser "optimista" si dejan de "entrar los focos" en cada reunión y se abordan las cuestiones de fondo y no los titulares.

En este sentido, mantuvo su total rechazo a una reforma laboral que sea sinónimo de abaratar el despido porque señaló que esto "no llevará a nada" porque siempre habrá un país que resultará más barato que España. "Por esta senda, acabaremos por parecernos más a Marruecos que a Alemania", lamentó.

"No es una cuestión de intransigencia sindical", sino un aspecto en el que nos jugamos el futuro modelo económico del país y la convivencia, advirtió el máximo representante de UGT en Catalunya.

SOBRE LA REBAJA DE LAS COTIZACIONES

En relación con la posible rebaja de las cotizaciones, una de las últimas propuestas que estaba sobre la mesa antes de que se truncara el diálogo en agosto, afirmó que no es una medida que deba aplicarse de forma uniforme a todos los sectores.

Los sindicatos estaban entonces de acuerdo con una rebaja temporal del 1% en las cotizaciones, algo que la CEOE consideró insuficiente. "A algunas empresas no les hace falta esta rebaja de cotizaciones; hagámoslo con criterio", señaló Álvarez.

Apuntó a que actividades más castigadas como el sector del mueble o del automóvil sí que podrían ser objeto de rebajas de este tipo de carácter temporal y que incluso podrían alcanzar el 5% que pedía la patronal.

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