BARCELONA, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) ha informado este viernes en un comunicado de que no hay constancias de avispas asiáticas en la red de parques metropolitanos de Barcelona, pero sí que se han notificado tres puntos de la metrópolis con presencia de esta especie invasora, y además ha señalado que tiene un dispositivo preparado para actuar en caso de detención del insecto.
El equipo técnico del AMB ha dado información a los operarios de parques y playas para que puedan diferenciar y detectar la presencia de la avispa asiática y avisar para que se proceda a la retirada del nido.
El primer avistamiento fue el 5 de julio, cuando el cuerpo de agentes rurales localizó un nido en construcción en el interior de un contenedor de Vallirana (Barcelona), el segundo el 13 de julio, en un jardín interior de la sede de la Universitat de Barcelona (UB) en la plaza Universitat, y el más reciente el 6 de agosto, en un piso cercano al parque Can Solei-Ca l'Arnús de Badalona.
El año pasado se registraron un total de 370 nidos, cifra que supone un aumento del 68% respecto a 2016, por lo que este año la Generalitat ha elaborado una campaña dirigida a la ciudadanía para establecer mecanismos de control más exhaustivos y sensibilizar sobre este problema, que provoca graves efectos sobre los ecosistemas, según ha informado el AMB.
De este modo, cualquier persona puede emitir información a través del teléfono 112 o efectuando un tuit en el perfil @agentsruralscat cuando notifique la existencia de un espécimen o nido.
La avispa asiática es una especie invasora plenamente instalada en Catalunya desde el 2012, cuando apareció en el Alt Empordà (Girona), uno de los puntos más afectados junto a otras comarcas de Girona como la Garrotxa, la Selva, el Pla de l'Estany i el Gironès, y pese a que su picadura es más dolorosa que la avispa autóctona, no es peligrosa para las personas.
Las principales diferencias entre la especie asiática y la autóctona son: el color, siendo la primera castaño oscuro con el tórax castaño y amarillo anaranjado, la longitud de la avispa obrera, que mide unos tres centímetros en el caso de la variante asiática, y el color de las patas, siendo las de la avispa autóctona de color marrón y las de la asiática amarillas.
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