Artur Mas insta a "hacer posible aquello que es necesario"

Foto: EUROPA PRESS

BARCELONA, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha instado a "hacer posible aquello que es necesario" como un derecho y un deber de la clase política.

   Lo ha sostenido en la ceremonia de concesión de las Medallas de Oro de la Generalitat al fallecido exconseller de Cultura Max Cahner y al arquitecto Oriol Bohigas.

   "Dormidos o despiertos lo importante es que lo veamos claro, que no perdamos el rumbo", ha dicho Mas, quien ha citado que una de las definiciones de la palabra 'política' es precisamente el arte de hacer posible aquello que se considera necesario.

   Mas ha asegurado que mucha gente subraya la necesidad de "ir adelante" al servicio de valores como el bienestar, la justicia social, la cultura y la democracia, y ha añadido que a la complejidad del actual momento se suman energías que se están despertando en favor de un proyecto de futuro.

   En este sentido, ha ensalzado la labor de Max Cahner y Oriol Bohigas, quienes en su momento "sembraron la semilla que hoy permite recoger sus frutos", y ha remarcado el compromiso de ambos premiados, representando Bohigas la transformación de Barcelona, y Cahner la de Catalunya.

   Mas ha remarcado que el punto de tristeza de esta ceremonia es la ausencia de Max Cahner: "Hemos llegado tarde pero hemos llegado", ha dicho el presidente, que ha incidido en la importancia de no olvidar que Max Cahner merecía esta distinción.

"ORDENADOR" DE LA CULTURA

   Glosado por el expresidente Jordi Pujol, Max Cahner ha sido definido como el "ordenador e impulsor" de la cultura catalana en todas sus vertientes, así como el responsable de la creación de las herramientas de esta cultura como una verdadera obsesión, ha dicho.

   Jordi Pujol ha asegurado que la muerte de Cahner y este homenaje se celebra en un momento "muy trascendental" para Catalunya, cuando hay quien trata de destruir la catalanidad, ha asegurado.

   "El peligro ahora nos viene del descabezamiento del poder político, del ahogo del poder financiero y del riesgo de que esto afecte a la calidad de vida de la sociedad catalana", ha dicho Pujol, que ha lamentado el peligro en que se ha puesto la sociedad del bienestar y la lengua.

   Pujol ha abandonado el estrato visiblemente emocionado tras afirmar: "Como Max Cahner de carácter no era fácil, y quizás no siempre supimos expresar nuestra admiración y afecto, aunque sea un poco tarde, permitidme que yo la exprese".

   La hija de Max Cahner, Joana Cahner, que ha recogido el premio, ha asegurado que esta distinción habría reconfortado y endulzado la última etapa de su padre, marcada por su retirada "seguramente no deseada" de la vida académica y por una incipiente enfermedad.

   "Nos complace constatar que en tiempos llenos de desencuentros nuestro padre haya conseguido crear un consenso unánime en favor de la cultura catalana", ha dicho.

   Pere Portabella, que ha glosado al arquitecto Oriol Bohigas, ha remarcado que es "una de esas personas avivadas por la curiosidad", mientras que el galardonado ha agradecido el premio, y ha asegurado que en su caso se ha producido una exageración por estar incluido en un club de premiados tan insigne.

   La ceremonia ha contado con la presencia del expresidente José Montilla, la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, además de la mayoría de los consellers de la Generalitat, como Ferran Mascarell, Irene Rigau, Neus Munté, Francesc Homs, Santi Vila, Germà Gordó y Andreu Mas-Colell, así como la esposa de Artur Mas, Helena Rakosnik.