Advierte de que los disturbios de anoche son un "aviso" de cara a las fiestas de Gràcia
BARCELONA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Hereu, exigió hoy a la Generalitat, que a través de los Mossos d'Esquadra, tenga "más información y conocimiento previo" para "prevenir" posibles alborotos provocados por colectivos que "tenemos suficientemente identificados", en relación a los hechos sucedidos en Gràcia.
Hereu condenó los altercados causados por un grupo de 'okupas' que quemaron contenedores y destrozaron mobiliario urbano, en protesta por el desalojo previsto para hoy de la casa okupada de la calle Santa Àgata, conocida como 'La Fera'. Uno de los incendios afectó a un transformador de Fecsa, lo que dejó sin luz a 1.500 usuarios.
A pesar de calificar de "correcta" la actuación de los Mossos d'Esquadra en los hechos de anoche, aseguró que todos los esfuerzos policiales "se volcaron en el desalojo programado de la casa okupada" y "constatamos que no se identificó esta acción previa" de los okupas, que realizaron anoche.
El quinto teniente de alcalde de Barcelona y también presidente del Consejo de distrito de Gràcia advirtió de que "el sistema policial debe ser capaz de detectar estos elementos", por lo que exigió que "esto se haga".
"Estamos ante fenómenos complejos, que necesitan tiempo" y es "necesario que los Mossos d'Esquadra tengan investigaciones abiertas, que sin duda las deben tener", pero "se requiere de más investigación para poder prevenir este tipo de hechos", aseguró Hereu.
EXIGE DETENCIONES.
Exigió a la Policía que "detenga" a los autores de los hechos, que fueron "un pequeño grupo de encapuchados" y avanzó que el Ayuntamiento de Barcelona "ejercerá de acusación popular y particular" para "defender los derechos de los vecinos de Gràcia y la convivencia en el barrio"
El portavoz municipal aseguró que "todo el conocimiento y la información de que dispone el Ayuntamiento se pone a disposición de quienes deben enfrentarse contra estos colectivos", en clara alusión a la Policía autonómica, desplegada desde el pasado noviembre en Barcelona.
"ATENTADO CONTRA LA CONVIVENCIA VECINAL".
Hereu advirtió de que los disturbios acontecidos anoche en Gràcia son un "aviso" de cara a la Fiesta Mayor del barrio, porque, en el marco de estas celebraciones, "decenas de personas pueden establecer acciones premeditadas", por lo que "tomamos buena nota". "Las cartas están encima de la mesa", aseguró.
"Este es un aviso y nos marca aquello que estos colectivos pueden estar dispuestos a hacer de cara a las fiestas de Gràcia", insistió Hereu, quien advirtió de que este grupo "ha atentado no contra una cierta institución, sino contra la convivencia de los vecinos del barrio".
"Los vecinos están indignados" y "ya no tienen aquella simpatía de antes" por el fenómeno okupa, por lo que "el vínculo con ellos está absolutamente roto". "'La Fera' se ha ido del barrio y todo el mundo está muy contento", ya que todo esto supone "un ataque frontal a la convivencia y a los derechos ciudadanos"
21.000 EUROS EN DAÑOS MATERIALES Y GASTOS DE LIMPIEZA.
El Ayuntamiento de Barcelona valoró hoy en 16.000 euros los daños que los 'okupas' causaron en bienes materiales públicos, especialmente contenedores y semáforos de las calles de Gràcia, y otros 5.000 euros en el gasto que supuso el despliegue del servicio de limpieza, por lo que en total asciende a 21.000 euros.
Aparte de estos gastos, hay que sumar el destrozo de algunas cabinas telefónicas, situadas en la vía pública, y de una entidad bancaria, explicó Hereu.
LOS VECINOS, ENVUELTOS EN "UNA PELÍCULA DE MIEDO".
"En una noche que iba a ser tranquila, los vecinos se vieron inmersos en una película de miedo", porque "los okupas usaron una estrategia de guerrilla, empezaron a cortar calles, quemaron contenedores y pusieron clavos en el suelo para impedir el acceso de los servicios públicos", aseguró.
Hereu aseguró que esta situación dificultó el acceso de los distintos servicios, especialmente el del cuerpo de los Bomberos de Barcelona, cuyos agentes recibieron la primera llamada de aviso a las 22.26 horas.
"IMPOSIBILITARON" EL ACCESO DE LOS BOMBEROS.
"Llegaron a la zona el origen en cinco minutos, pero para llegar a sofocar los pequeños incendios que se produjeron les fue muy difícil porque el acceso fue imposible", apuntó Hereu, quien defendió la actuación de la Guardia Urbana y de los Bomberos.
Paralelamente, la Guardia Urbana "se encargó de cerrar las distintas calles, para poder desarrollar sus tareas de control del orden público" y "se intentó restablecer la normalidad lo antes posible", aseguró.
En su relato de los hechos, Hereu explicó que finalmente los Mossos d'Esquadra consiguieron el permiso judicial para entrar en la finca, donde había un transformador de Fecsa-Endesa, que había dejado a sin luz a 1.500 usuarios del barrio.
"Fue un acción premeditada y bien estructurada y se trato de un acto vandálico", aseguro Hereu, quien advirtió de que el hecho de que los autores de los hechos "cortaran la luz de forma general" puede "suponer un agravante" a la hora de pedir responsabilidades si se producen detenciones.
