BARCELONA, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este miércoles una nueva regulación que permite reducir de un 80 a un 51% el espacio para vender diarios, revistas, libros u otras publicaciones.
La medida, que ha prosperado con el apoyo del gobierno municipal (PSC) y Junts, y la abstención de BComú, ERC, PP y Vox, amplía hasta un 49% el espacio para exponer otros productos, y abre la puerta a vender café o productos alimentarios envasados, pero no alcohol.
Según ha informado el consistorio en un comunicado, esta modificación no afecta a que "la actividad esencial y mayoritaria tiene que seguir siendo la venta de estas publicaciones".
La nueva regulación también limita el espacio público disponible para los quioscos, flexibiliza horarios y define aspectos no regulados hasta ahora como la fijación de un plazo máximo de 6 meses para la transmisión de la titularidad en caso de defunción o la concreción de un órgano competente para tramitar penalidades.
Actualmente hay 287 quioscos instalados en la vía pública de Barcelona (51 menos que en 2018), de los cuales 253 tienen una adjudicación vigente, 25 están vacantes y 9 forman parte del proyecto de la cooperativa del Institut Municipal de Persones amb Discapacitat (IMPD).