BARCELONA, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El epílogo de la fiesta de La Mercè de Barcelona, la multitudinaria Festa al Cel, se celebra este sábado y domingo en el litoral de la ciudad con la recomendación municipal de no utilizar el coche para desplazarse al evento y la prohibición de bañarse en la playa.
El Ayuntamiento no dudará cerrar algunas salidas de la Ronda Litoral a causa de retenciones para asistir a una fiesta que coincidirá con la Red Bull Air Race (RBAR), y en la que se esperan 1,2 millones de espectadores.
Para evitar complicaciones, el Consistorio pide llegar al frente marítimo con transporte público. Las líneas 1, 2 y 4 del Metro funcionarán con una frecuencia de hora punta pese a ser fin de semana. Autobuses lanzadera conectarán el litoral con paradas de Metro.
Pese a considerar el Metro como la mejor opción, el Ayuntamiento también recomienda utilizar el Trambesòs y la bicicleta particular. Éstas se podrán aparcar en un espacio vigilado por la Guardia Urbana y también destinado a motocicletas que se ubicará detrás de la arena y el paseo.
También desaconseja utilizar el servicio público de bicicletas, el Bicing, como forma de llegar al litoral para evitar que a los usuarios les sea imposible dejar las bicicletas en las estaciones. Quienes lo utilicen, las pueden dejar en puntos intermedios como Gran Via, la plaza de Glòries y la Verneda.
Quienes quieran evitar grandes aglomeraciones, pueden acudir este sábado al festival, cuando también se harán las pruebas clasificatorias de la Red Bull Air Race. Los barceloneses podrán ver y oír el zumbido de aviones antiguos de pasajeros y vuelos acrobáticos.
Además, participarán aviones de la II Guerra Mundial, y aviones y helicópteros del Ejército, exhibiciones que rechaza ICV-EUiA por el hecho de que la ciudad sea "referente de paz". El rechazo a aeronaves militares también lo han manifestado en otras ediciones CiU y ERC.
