Las salas de venopunción se integrarán en el servicio público de salud
BARCELONA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Todos los distritos de Barcelona contarán con narcosalas este año, a excepción de Gràcia, Eixample y Les Corts, donde también están proyectadas en el horizonte de 2014, según anunciaron hoy la consellera de Salud de la Generalitat, Marina Geli, y el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento, Carles Martí.
De esta forma, la capital catalana pasará de las cuatro salas de venopunción actuales, conocidas popularmente como narcosalas, a un total de 13 en 2014.
Sin embargo, el nuevo modelo asistencial se integra en la red sanitaria pública, que como novedad incorpora zonas de atención y seguimiento, también para adicciones relacionadas con el alcohol y el tabaquismo, en una nueva perspectiva del problema.
De esta manera, los drogodependientes serán atendidos en los servicios de salud mental de centros de atención primaria (CAP) y en las unidades específicas del Hospital del Mar, el Clínic y el Sant Pau de Barcelona, como hasta ahora ocurre en el de Vall d'Hebron.
En concreto, el Forum --en el distrito de Sant Martí--, Sants, Sarrià-Sant Gervasi, Nou Barris, Sant Andreu y el centro Rec Comtal --en Ciutat Vella-- contarán con una sala de venopunción este año, si bien están proyectadas nuevas en la Barceloneta, en Sant Martí, Sant Andreu, en el Clínic, en el Sant Pau --ambos en el Eixample--, Les Corts y Gràcia para 2014.
En la presentación Plan operativo de la asistencia integral de la salud mental y las adicciones, Martí admitió que el distrito de Ciutat Vella "está pagando una centralidad excesiva", y defendió que el nuevo mapa "descongestiona y descentraliza" este peso.
DESCONGESTIÓN DE CIUTAT VELLA
Para repartir las salas --que el Ayuntamiento denomina programas de reducción de daños-- en Ciutat Vella, está prevista la apertura de una nueva sala de venopunción en la Barceloneta, vinculada al Hospital del Mar antes de 2014, el cierre de la sala de Junta de Comerç y la de Pere Camps.
La Sala Rec Comtal incorporará una zona de venopunción y la de Baluard, también en Ciutat Vella, seguirá funcionando como narcosala e incorporará un consultorio médico.
La red sanitaria dedicada a las adicciones se dividirá en cuatro zonas para mejorar su cobertura --Barcelona Litoral-Mar, Barcelona Norte, Barcelona Izquierda y Barcelona Derecha-- explicaron Martí y Geli.
A su juicio, una de las principales novedades del plan es la incorporación de "programas de reducción de daños" --salas de venopunción-- para agilizar el proceso de desintoxicación. "No se pueden evitar las drogas, pero sí minimizarlas", dijo Martí
NO AMPLIAR LA DEMANDA
Geli justificó que la planificación de los cuatro territorios dedicados tiene el claro propósito de "minimizar el conflicto, no ampliar la demanda". "Las drogas están en todas las culturas y hay que luchar por estos enfermos mentales", dijo.
La nueva perspectiva de abordaje hará que desaparezcan modelos aislados de salas de venopunción. Estas salas realizan servicios básicos de intercambio de jeringuillas, punción, educación sexual y drogas, prevención de enfermedades y control de infecciones.
En adelante, también desarrollarán servicios dirigidos a personas en riesgo de exclusión social, relacionados con la acogida, duchas, ropa, comida, vivienda y documentación.
La consellera argumentó que "las adicciones son trastornos mentales" y que "sufrir un trastorno mental no relacionado con drogas aumenta la probabilidad de sufrir adicciones y al revés".
La implantación del nuevo Plan operativo de integración de las adicciones a la red sanitaria se plantea de una forma progresiva hasta 2014.
