El belga Jan Fabre expone en Girona obras inéditas sobre la metamorfosis del cuerpo humano y animal

GIRONA 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

El controvertido artista belga Jan Fabre expone desde hoy hasta el próximo 7 de enero una selección de obras inéditas en la Sala de Exposiciones de la Rambla de Girona, convirtiéndose así en el primer autor extranjero que expone en este espacio.

Aunque Fabre es conocido en Catalunya sobre todo por la escenografía, en la muestra combina esta faceta con el dibujo, la escultura, el cine, el teatro e, incluso, la edición de una revista de pensamiento que él mismo dirige.

En la exposición, que lleva por título 'El hombre que escribe sobre el agua', se podrán observar por primera vez un grupo de esculturas de bronce, entre ellas un autorretrato a tamaño real y una instalación de 10 metros cuadrados, todas ellas piezas inéditas.

La temática insertívora, la transformación del propio cuerpo y la piel entendida como una armadura son algunas de las constantes de la muestra. "El escarabajo es para mí la memoria de la vida", asegura el artista, conocido como "autor de la metamorfosis".

A pesar de que las Salas Municipales de Exposición de Girona ya han contado con muestras de arte de catalanes y españoles con proyección internacional como Evru, Muntadas, Canogar o Eulalia Valldosera, ésta es la primera vez que acogen la obra de un autor extranjero. Por este motivo, el artista ha realizado una serie de obras especialmente pensadas para la muestra.

Además de la exposición, el autor belga participará de nuevo en Girona en el Festival Temporada Alta con una instalación de video titulada 'El ángel de la muerte', durante los días 17 y 18 de noviembre. Fabre ya participó hace dos años en este festival de otoño con la obra 'Quando l'uomo principale è una donna'.

En este espectáculo, Fabre busca la belleza absoluta y la espiritualidad entre el orden y el caos. Las imágenes de video irán acompañadas de la interpretación del saxofonista Éric Sleichim y de la bailarina Ivana Jozic.

En el montaje se recrean tres espíritus: el artista Andy Warhol, el bailarín William Forsythe y el propio Jan Fabre, que reflexiona sobre la ambigüedad sexual y la condición del artista.