BARCELONA, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un sargento del Cuerpo de Bomberos de la Generalitat, José Pino, que trabajó el primer día en el incendio de Horta de Sant Joan (Tarragona), el 20 de julio de 2009, ha declarado en el Juzgado de Gandesa que instruye el caso que el informe oficial "está adornado" porque él tiene constancia de que se retiraron efectivos que no constan en el documento.
En su declaración ante la juez de Gandesa que instruye el caso, a la que ha tenido acceso Europa Press, Pino, que lleva 27 años en el Cuerpo y que participó en las primeras horas de la extinción, ha considerado que en las reuniones posteriores de los bomberos con la cúpula directiva se les ha tratado de "adoctrinar", diciéndoles que todo había sido un accidente cuando, según él, fue "un cúmulo de errores y negligencias".
Ha lamentado que los mandos de la extinción no escucharon a la gente del lugar, que "conocen el territorio y tienen gran cultura popular", y también que se retiraran efectivos ya que cuando se hace "es porque todo está en fase de control".
Para este bombero, en la reunión que tuvo lugar en Bellaterra con el jefe de los Bomberos, Joan Rovira, se les intentaba "adoctrinar de cómo debían considerar que se había producido el incendio" y cree que "evidentemente" se han producido errores "porque si no no se hubiese producido la muerte de los compañeros".
Otro bombero que trabajó el primer día de la extinción, Daniel Ramon Gaseni, con 24 años de experiencia, ha aseverado que a su entender, no considera que hubiera fallos en la extinción, aunque ha admitido que en incendios "tan grandes" falta más personal "controlando, descargando, diversificando el trabajo de los responsables".
