BARCELONA 3 May. (EUROPA PRESS) -
El grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona reclamó hoy al alcalde Joan Clos que abra un investigación por el sacrificio "inexplicable" de una perra que llevaba el chip identificativo en el Centro de Acogida de Animales y por no haber avisado a su dueña, lo que supone "un incumplimiento del todo de la legislación".
La afectada es Maria José Testor Valls, que perdió a su perra 'Neska' en Barcelona el pasado sábado, llamó reiteradamente a la Guardia Urbana, al Centro de Acogida de Animales y a la perrera municipal de Collserola, para reclamar información y para describir los rasgos físicos de la perra.
Los responsables del Centro de Acogida de Animales informaron a la dueña el día 25 de abril, tres días después de su pérdida, que sacrificaron a la perra 'Neska' el día anterior porque "estaba enferma", según explicó hoy el grupo municipal de CiU.
La dueña "no ha podido disponer ni siquiera del cuerpo del animal, ya que el mismo día fue retirado del contenedor donde se depositó la basura, aseguró CiU.
Ante esta situación, CiU acusó al Ayuntamiento de incumplir la Ley de Protección de Animales y de la ordenanza sobre protección, tenencia y venta de animales, así como de no cumplir los plazos de espera antes de tomar ninguna decisión drástica, agravada por el hecho de que el animal estaba identificado por un chip.
El grupo municipal de CiU denunció "una sucesión incomprensible de irregularidades tanto administrativas como de protocolo de funcionamiento que ponen de manifiesto una muy mala gestión de la perrera municipal".