Escarp (PSC) afirma que los "puntos débiles" serán fuertes en el proyecto ejecutivo
BARCELONA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, criticó hoy que la empresa que gestiona el tranvía --Tram-- financie la publicidad y estudios sobre la conexión de este medio de transporte por el tramo central de la avenida Diagonal. "Los estudios y la publicidad la está pagando la empresa de tranvía", aseguró citando informaciones del Consistorio.
Lo dijo en el debate político de la jornada 'La nueva Diagonal a debate. Visión política, visión técnica' del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, en el que también participaron la concejal de Seguridad y Movilidad, Assumpta Escarp (PSC); el segundo teniente de alcalde, Ricard Gomà (ICV-EUiA); Alberto Villagrasa (PP) y Ricard Martínez (ERC).
Forn afirmó que no cuestiona la "legitimidad de que --Tram-- aspire a la conexión" del tranvía, pero instó a hablar claro. "Lo que no sirve es que los responsables municipales digan un día que no es obligatorio --el tranvía por la Diagonal-- y ahora descubrimos que el Ayuntamiento nos dice que una parte de la campaña de publicidad la paga la empresa del tranvía", afirmó.
Además, planteó si también ha financiado Tram el cortometraje de la Diagonal que "ha costado 200.000 euros", y el viaje con periodistas a Burdeos del miércoles de la semana que viene. Acudirá el alcalde, Jordi Hereu, para ver los 14 kilómetros de tranvía con catenaria a nivel del suelo, sistema que se plantea para la Diagonal. Martínez avisó de que lo fabrica una sola compañía.
CONSENSO SOBRE LA C
Los grupos mostraron su consenso sobre la opción C de descarte de las de reforma (A, paseo; B, rambla), y consideraron que en caso de que la C gane en la consulta, significará que los barceloneses no quieren ni la A ni la B, de forma que deberá buscarse un proyecto alternativo de reforma. Pese a opinar que la Diagonal necesita un cambio, cada grupo planteó sus dudas.
Forn dijo que no se siente vinculado con ninguna de las dos opciones de transformación sobre la mesa, ya que no las ven suficientemente diferenciadas, y la A es "excesivamente radical" con los coches, y la B obliga a "liquidar" los árboles.
Por su parte, Villagrasa (PP) consideró que otras reformas son posibles y criticó gastar 2 millones de euros en el proceso participativo cuando es "una campaña publicitaria" para la imagen de Hereu.
Martínez (ERC) vio evidente que la consulta "no contempla la introducción del tranvía", cuestión que dejó al plano técnico una vez finalizado el referendo, y criticó la "confusión" que se genera a los ciudadanos. Según él, es "muy atrevido" dar los criterios por cerrados cuando el Gobierno municipal está en minoría y puede haber "cambios profundos" en las próximas elecciones.
Por contra, Gomà (ICV-EUiA) dio su "sí' convencido" al proceso, y garantizó que las dos opciones de reforma apuestan por que los tranvías vertebren un nuevo modelo de movilidad intermodal. Añadió que la reforma será una de sus prioridades de los próximos años.
Escarp (PSC) admitió que el proceso tiene ahora "puntos débiles", como el aparcamiento de motocicletas y las zonas de carga y descarga que deberán convertirse "en puntos fuertes en el proyecto ejecutivo". Añadió que con la consulta se vota "la viabilidad social" de la reforma, ya que la técnica ya viene avalada por los técnicos.
