Clos pide a los okupas que no ocasionen altercados en las fiestas de Gràcia

Actualizado: viernes, 21 julio 2006 17:45

CiU y PP le piden a Clos que "haga de alcalde" y que genere "confianza" a los ciudadanos

BARCELONA, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, reclamó hoy a los okupas que no ocasionen altercados en las fiestas de Gràcia, tras los disturbios que protagonizaron el pasado 28 de junio en las calles de este barrio, en protesta por el desalojo de una casa.

Durante el Pleno municipal, Clos se justificó así ante las críticas de los grupos municipales de CiU y PP, quienes le reprocharon sus declaraciones sobre las fiestas de Gràcia, en las que reconocía que no sabía que podía pasar en estas celebraciones.

Clos aseguró que fue mal interpretado y que su intención fue "rogar" a ciertos grupos que "suelen provocar altercados" que "no volvieran a hacerlo", teniendo en cuenta que "los recientes disturbios que protagonizaron provocaron el rechazo ciudadano".

El portavoz del grupo municipal de CiU, Joan Puigdollers, calificó de "muy graves" las manifestaciones realizadas por el alcalde sobre las fiestas de Gràcia y le reclamó que "se dedique a generar confianza con los ciudadanos". "Hay que pensar antes en lo que uno dice", apuntó.

En el mismo sentido se pronunció el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández Díaz, advirtió a Clos que no le pide que "haga de Rappel, sino que se dedique a hacer de alcalde" para atajar los problemas de seguridad y los disturbios generados por los okupas.

El debate sobre la seguridad en Gràcia volvió a salir a la palestra a raíz de un ruego presentado por CiU en el que se pedía al Ayuntamiento de Barcelona que explicara cómo garantizará la celebración cívica en las fiestas programadas para este verano en la ciudad.

El concejal de Seguridad, Ferran Julián, destacó que los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana están trabajando para colaborar de forma conjunta y poder afrontar así celebraciones como las fiestas mayores de los barrios de Gràcia y Sants.

Las críticas sobre la mala coordinación entre ambos cuerpos policiales también centraron parte del debate y salieron a la palestra a raíz de una proposición del PP en el que pedía a la Generalitat y al Ayuntamiento a llevar a cabo un "eficaz" trabajo conjunto para garantizar la seguridad.

Fernández Díaz críticó "la falta de reacción" policial ante los altercados vividos en Gràcia, el pasado 28 de junio, así como los "fallos de previsión" de los Mossos d'Esquadra y también del propio cuerpo de la Guardia Urbana.

El líder popular censuró que Clos anunciara su intención de "dialogar" con los okupas y lamentó que no haga lo mismo con la consellera de Interior, Montserrat Tura, a quien el alcalde le reprochó públicamente la actuación policial ante los disturbios de Gràcia.

Por su parte, la concejal de CiU Magda Oranich descartó hacer "catastrofismo", pero aseguró que, en el caso de Gràcia, "desgraciadamente, esta coordinación policial no fue nada eficaz" y "los enfrentamientos entre Ayuntamiento y Generalitat no ayudan para nada".

EL CONCEJAL DE GRÀCIA RECONOCE FALTA DE EFECTIVIDAD.

Ante estas críticas, el concejal de Gràcia, Ricard Martínez, replicó que "el problema no es la coordinación policial", sino "posiblemente de la efectividad". "Sería imposible establecer un dispositivo de seguridad en Gràcia, si no existiera una coordinación policial previa", añadió.

La concejal de ICV Elsa Blasco criticó la visión alarmista del PP sobre la seguridad en la capital catalana. "Barcelona no es Disneylandia, pero tampoco es una ciudad sin ley" porque "la coordinación policial está garantizada", apuntó.