BARCELONA 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
La filial de la multinacional estadounidense Aecom en Catalunya y la investigadora Roberta Carafa han desarrollado un biosensor con IA que mide el nivel de contaminación del agua en tiempo real, según un comunicado de la Generalitat, que apoya el proyecto a través de Acció.
La empresa ya ha obtenido la patente europea para el dispositivo (de copropiedad con la URV), con la previsión de comercializarlo a medio plazo, cuando se cierre un acuerdo con un socio colaborador para sacarlo adelante.
El proyecto ha tenido apoyo de la agencia de competitividad Acció, de la Conselleria de Empresa y Trabajo, con 142.678 euros de Tecniospring Industry (un programa con un presupuesto de 11 millones de euros cofinanciados entre Acció y la CE).
CÓMO FUNCIONA
Un biofilm de microalgas y bacterias en el dispositivo permite monitorizar el grado de toxicidad del agua, y la IA lo compara al instante con las previsiones de calidad que debería tener.
El biosensor tiene dos pequeños espacios donde se ubican los biofilms, que pueden detectar niveles de toxicidad de hasta 1 microgramo/litro.
Con los datos obtenidos, los algoritmos hacen modelos de previsión de los niveles de contaminación, desde próximos minutos hasta semanas: si los datos sobrepasan mucho las predicciones hechas, el dispositivo hace saltar una alarma.