BARCELONA 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
La incautación por parte de los Mossos d'Esquadra de plantaciones de marihuana escondidas entre campos de maíz y otros cultivos, en fincas y en bosques está creciendo desde finales de agosto y septiembre, con varios golpes importantes al tráfico de este estupefaciente que han permitido aflorar cientos de plantas.
En una entrevista de Europa Press, el inspector jefe del Área de Recursos Operativos (ARRO) de Lleida, Esteve Bernat, ha explicado que gracias al Plan Operativo Específico (PEO) del Mundo Rural están más presentes en el territorio y tienen más contactos con los agricultores, lo que permite obtener información crucial para detectar estas plantaciones ilegales.
En este sentido, ha recalcado que este plan comporta que la información circule de manera "más fluida" y que haya mejorado la interlocución con agricultores, sindicatos agrarios, ayuntamientos y comunidades de regantes.
Esconder las plantas en un huerto o en una plantación, en puntos de difícil acceso y alejados, no es un sistema de ocultación nuevo, pero ahora han dado con más casos porque cuentan con más medios aéreos, tanto de Mossos como de Agentes Rurales, que son claves para poder divisar la marihuana en medio de las plantas.
LOS AGRICULTORES NO LO SABEN
Según Bernat, los agricultores desconocen que los traficantes tienen allí sus plantas porque las colocan en medio del maíz --u otros cultivos--, que alcanza grandes dimensiones, y que sirve para disimularlas.
Solo las descubren cuando hacen un reconocimiento más detallado, o cuando se llega a septiembre, y las hojas del maíz se vuelven marrones y dejan al descubierto el verde intenso de la marihuana.
Mientras, el agricultor riega y cuida las plantas ilegales sin saberlo, aunque según el inspector, cuando las descubre siempre denuncia.
Este septiembre, solo en Lleida han intervenido 350 plantas que alcanzan los 120 kilos de marihuana, en un total de 18 actuaciones, además de imputar a 16 personas y realizar dos detenciones.
Los Mossos de Lleida han llegado a realizar siete actuaciones en un solo día, concretamente el jueves 22 de septiembre, en Artesa de Lleida, Torres de Segre, Juneda y Bell-lloc.
En algunos casos han llegado a detectar plantas de más de dos metros de altura ya que en septiembre empieza a ser el momento de la cosecha.
DECOMISOS DE 400 PLANTAS
En Girona se han producido varios golpes importantes, uno en Maçanet de la Selva con la incautación de 400 plantas y en una masía de Sant Miquel de Campmajor de 177.
En Tarragona dieron con 400 plantas este septiembre, y los casos más destacados fueron en Xerta, cerca del cauce del río Ebre, donde tenían 145 plantas camuflada en una explotación de naranjos, y en Tivissa, con más de 100 plantas entre olivos y pinos.
También se decomisaron 170 plantas en una urbanización de Olèrdola, que el propietario mantenía escondidas en un lugar de difícil acceso.