MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía pertenecientes a la Brigada de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial han desarticulado una red de dedicada a la generación y clonación de tarjetas de crédito para comprar a través de Internet y ha detenido a sus diez integrantes, informó hoy este Cuerpo.
Las detenciones se han registrado en L'Hospitalet (Barcelona), en Barcelona capital y en Valencia, y los detenidos, que supuestamente recibían los bienes comprados de forma fraudulenta, son de origen español, ecuatoriano, dominicano y camerunés.
La red estaba especializada en comprar a través de Internet para su posterior venta de vinos selectos y, para ello, utilizaban de forma fraudulenta tarjetas de crédito que previamente habían clonado o cuyas numeraciones habían sido generadas por los integrantes del grupo.
Antes de hacer las primeras compras, los detenidos comprobaban previamente la efectividad de las tarjetas comprando billetes de tren o de avión también a través de Internet en operaciones que, una vez autorizadas, después anulaban.
Además, los distintos miembros de la red se intercambiaban entre sí las tarjetas generadas o clonadas e incluso, en ocasiones, las enviaban a conocidos suyos en el extranjero, también para usarlas fraudulentamente.
La Policía ha desarrollado la operación en colaboración con las secciones de delitos tecnológicos de las Jefaturas Superiores de Policía de Catalunya, Castilla y León, Aragón y la Comunidad Valenciana.
INVESTIGADOS DESDE DICIEMBRE.
Las investigaciones comenzaron el pasado mes de diciembre, cuando una empresa dedicada a la venta de vinos de calidad a través de Internet denunció que varias personas habían adquirido cajas de vino realizando el pago con una tarjeta de cuya autenticidad dudaban.
A partir de esta denuncia, los investigadores comprobaron que las numeraciones empleadas para las compras habían sido clonadas en unos casos y generadas por los propios dueños en otros.
Los productos adquiridos de esta forma eran enviados a direcciones de L' Hospitalet (Barcelona), Leganés (Madrid) y Fuenlabrada (Madrid), donde los individuos encargados de recibir la mercancía en unas ocasiones esperaban en los portales de los inmuebles la llegada de los pedidos y, en otras, los retiraban directamente de la propia empresa de reparto.