Los dos candidatos a rector de la UdG se proponen conseguir más financiación para el centro

Actualizado: lunes, 9 noviembre 2009 20:18

GIRONA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los dos candidatos a rector de la Universitat de Girona (UdG), la actual rectora, Anna Maria Geli y el ingeniero químico Manel Poch, presentaron hoy sus programas electorales marcando en ellos, como claros objetivos, conseguir una mayor financiación -aunque en los últimos años los presupuestos se han liquidado con superávit-- y acabar el despliegue de los estudios de grado.

La candidata Anna Maria Geli aseguró que la UdG "necesita más financiación" por eso se marcó como objetivo conseguir recursos, lo que llevará a la universidad a trabajar en una doble dirección. Por un lado, tendrá que ser más competitiva y tener un mejor posicionamiento en la distribución de recursos públicos, y por el otro, necesitará ser más imaginativa para obtener más recursos externos tanto públicos como privados.

En su programa, la actual rectora no quiso entrar en el debate de la introducción de recursos privados en la universidad ya que "es obvio que hay que buscar el equilibrio justo", remarcó.

Hoy por hoy, más del 80 por ciento de los ingresos de la UdG son públicos, pero "hay margen de mejora", afirmó. Por ello, Geli planteó "un cambio radical en las dinámicas de dirección de la universidad", ya que propuso aumentar la autonomía de las unidades, pero a la vez exigirles mayor responsabilidad.

Por lo que a docencia se refiere, Geli se marcó como objetivo implantar algunos estudios nuevos que aseguren el crecimiento estratégico y la conexión de la universidad con las nuevas necesidades y ocasiones formativas. También reconoció una asignatura pendiente: aportar las infraestructuras necesarias para facilitar la implantación de másters oficiales.

El otro candidato, Manel Poch marcó en su programa cuatro objetivos claros: mejorar la posición de la UdG en la financiación de la Conselleria de Innovación, Universidades y Empresa de la Generalitat; potenciar la capacidad de la universidad como captadora de recursos externos tanto públicos como privados; modificar los sistemas de información y control; y conseguir que la gestión económica mejore en transparencia, agilidad y eficiencia.

En cuanto a los retos sobre el despliegue eficiente de los nuevos grados, Poch, resaltó que tan importante es su puesta en marcha como su diseño, ya que su continuidad dependerá del "nivel de cumplimiento de los objetivos descritos en las memorias y el grado de inserción de los titulados en el mercado laboral".

Así, apostó por desplegar los estudios de grado con criterios de calidad, eficiencia y optimización de recursos con el objetivo de asegurar su acreditación, incrementar los convenios de intercambio en el marco del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), potenciar la transversalidad entre los grados, reconocer la diversidad de metodologías docentes y reforzar la vinculación entre los estudios de grado y la oferta de másters y doctorados.