BARCELONA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La italiana Melania G. Mazzucco se ha sumergido en la vida de la escritora y viajera Annemarie Schwarzenbach en la novela 'Ella, tan amada' (Anagrama), en la que retrata el ambiente cultural de los años 30 y bucea en su enigmática personalidad.
La novela, ganadora de los premios Napoli y Vittorini en 2000, recorre la irregular y mitificada vida de Schwarzenbach, amiga de Thomas Mann y de sus hijos, los gemelos Klaus y Erika y consorte de un diplomático francés, su relación con su madre, su trayectoria literaria, sus viajes y su enigmática muerte prematura de esta andrónica mujer.
El mito que se creó alrededor de su figura queda resumido en la frase que Thomas Mann dijo de ella: "Si usted fuera un muchacho tendía que ser declarado excepcionalmente hermoso".
Es la extraña muerte de Annemarie Schwarzenbach tras una caída de bicicleta el punto de partida de la novela de Mazzucco, quien con esta novela quiso "resucitarla" para que dejara de ser "una nota a pie de página" en los libros.
Melania G. Mazzucco aseguró hoy en Barcelona que llegó al personaje de Schwarzenbach tras la lectura de esas "notas a pie de página" en volúmenes y quiso con 'Ella, tan amada' "explicar la vida de un personaje real como si fuese una novela".
Para acercarse a Annemarie Schwarzenbach, Mazzucco aprendió alemán para bucear en la obra literaria de la joven --que coincidió con la reedición de muchos títulos de la escritora-- y siguió sus viajes por Oriente Próximo o Estados Unidos, así como las apariciones de la joven en obras de Thomas Mann, Klauss Mann o Carson McCullers.
Para la redacción de esta novela, Mazzucco ha tenido acceso a las fotográfias realizadas por Schwarzenbach --"la mayoría inéditas"-- y a las realizadas por su madre, unas 10.000, aunque durante el proceso de redacción no quiso entrevistarse con familiares y conocidos.
La autora de 'Vita' afirmó que Schwarzenbach era un "andrónico perfecto que conseguía mitificarse en el otro sexo" pese a que "era incapaz de entregarse a nadie".
Mazzucco (Roma, 1966) aseguró que ella prefirió escribir una novela porque su intención no era "la búsqueda exhaustiva" de una biografía, sino la "simbólica" a través de los arquetipos de los que estuvo lleno su vida, lo que provoca que hable de Erika Mann, pero no de otras cinco mujeres con las que tuvo la misma relación.
A pesar de optar por la novela, la escritora italiana aseguró que en el libro "no hay nada que no haya sucedido" y definió el proceso como la reescritura después de haber quemado la biografía de Schwarzenbach siendo "'muy rigurosa'" con la verdad.
La escritora aseguró que en su obra existen personajes que se asemejan a Schwarzenbach y llegó a decir que en uno de sus relatos también muere de un accidente en bicicleta. Sin embargo, Mazzucco señaló que son dos autoras "antitéticas".