El Colegio Oficial de Veterinarios de Barcelona eleva la petición de prisión a siete años
BARCELONA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía ha pedido condenar a tres años de prisión al expresidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Barcelona (COVB) Josep Antoni Gómez Muro y a su extesorero Jordi Vil por presuntamente pagar a otros tres acusados 1,4 millones de euros con facturas falsas por obras que nunca se hicieron, según el escrito de acusación consultado por Europa Press.
La fiscal relata que los pagos se hicieron "con la intención de enriquecerse ilícitamente a costa" del COVB y de una mercantil cuyo único accionista es el propio colegio de la que Muro era el administrador único, según ha adelantado 'El País'.
El COVB, que interpuso de la denuncia que ha originado la causa, actúa como acusación particular y reclama una condena de siete años de cárcel, han explicado fuentes del colegio consultadas por Europa Press.
El escrito de Fiscalía señala que uno de los otros tres acusados era administrador de al menos cinco mercantiles que recibieron los pagos, por un total de 1.412.167,40 euros, y la fiscal señala que estas sociedades "ni tenían medios ni trabajadores para poder llevar a efecto las obras que supuestamente realizaron pero que efectivamente cobraron".
Otro de los acusados de encargaba de "coordinar las presuntas obras y de llevar personalmente las facturas mendaces a las oficinas del COVB", donde las entregaba a una trabajadora que a su vez las daba al entonces presidente del colegio.
Por todo, la fiscal les atribuye a los cinco los presuntos delitos de falsedad documental y apropiación indebida, y pide para todos la misma condena: tres años de prisión y multa de 5.400 euros.
Además, reclama que se les condene a pagar conjuntamente una indemnización de 1.430.913,02 euros para el COVB y la mercantil de la que es accionista y resultó también perjudicada.
OBRAS FACTURADAS
Entre los trabajos que se facturaron pero no se hicieron, la fiscal lista encargos como cambios en la iluminación para instalar tecnología led, o sustituir luces halógenas por fluorescentes.
También pagaron facturas para fijar un rótulo con las siglas del COVB en la fachada de su sede, para sustituir placas del faso techo y para hacer arreglos en el garaje y el almacén.
La fiscal expone que, a raíz de una inspección tributaria, el COVB y la mercantil de la que es accionista "tuvieron que hacer frente a una serie de liquidaciones de impuestos adicionales" que ascienden a 26.010 euros, que el colegio también reclama.
