La Generalitat propone duplicar la delimitación del Parque Nacional de Aigüestortes y Sant Maurici

BARCELONA 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Conselleria de Medio Ambiente y Vivienda de la Generalitat de Catalunya ha elaborado una propuesta que defiende prácticamente duplicar la actual delimitación de la zona que forma parte del Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici (Lleida) y que recoge algunas de las peticiones de los ayuntamientos de la zona.

El conseller de Medio Ambiente y Vivienda, Francesc Baltasar, y el director general de Medio Natural, Ramon Luque, presentaron hoy esta propuesta técnica, que ayer ya dieron a conocer a los miembros del Patronato de este parque natural, que actualmente cuenta con 13.901,16 hectáreas y otras 26.021,16 hectáreas de protección.

El proyecto de modificación que propone la Generalitat apuesta por incrementar en 13.000 el número de hectáreas del Parque Natural de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, al pasar de las 13.901,16 que hay en la actualidad a 26.668,43 hectáreas, lo que supone un aumento del 94%.

En el caso de las zonas periféricas, que sirven de protección del propio parque, el proyecto del departamento de Francesc Baltasar defiende pasar de las 26.021,16 a las 41.017,29 hectáreas, con un incremento de 14.966,13 hectáreas, lo que genera un aumento del 70%.

En global, la superficie total protegida, ya sea a partir del incremento de hectáreas del parque natural o de zona periférica, se amplía en 27.763 hectáreas, al pasar de 39.922 a 67.685 hectáreas, con un incremento del 70%.

Para seleccionar las zonas que debían incorporarse a la propuesta de ampliación de la Generalitat, inicialmente se detectaron 47 sectores. En cada uno de ellos, se elaboró una ficha que justificaba la ampliación, en función de la representación de especies y de hábitat.

Finalmente, el proyecto opta por integrar 10 nuevas zonas en el área del parque natural y otras 14 áreas en la periférica. Entre los nuevos sectores del parque figuran Colomers-Saboredo-Gerber-Cabanes y Estanys Cabdella, para la conservación de lagos, y la zona del Bessiberi-Conangles-Mulleres, por la protección de turberas.

En el caso de la zona periférica, se incluyen sectores como Valerties-Aiguamog-Ruda, por la conservación de bosques de abetosas, el sector de Gelada-Cardet y Altars-Llesui-Eviny, para la conservación de praderas y Filià-Rus-Llevata, para la protección de praderas, humedales y varias especies de aves.

PROHÍBIDA LA CAZA Y LA PESCA.

La integración de una zona en el área del parque natural supone la prohibición de la destrucción de vegetación y tala, la práctica de caza y pesca deportiva y la no tramitación de nuevos aprovechamientos hidroeléctricos. Además, también se regula los usos turísticos, recretativos y de tráfico de personas y vehículos.

En el caso de las zonas que pasen a formar parte del área periférica, que supone un 'cinturón de protección' del parque, los usos podrán ser los mismos, pero su regulación puede modificarse puntualmente.

Desde la Conselleria de Medio Ambiente se puede a llegar a incentivar los pastos para preservar las praderas o limitar el uso de embarcaciones de agua en ciertas épocas del año, para preservar ciertas especies, como la trucha de río.

SIN TRABAS PARA LA INTERCONXIÓN ENTRE VALL DE BOI Y VALL FOSCA.

El conseller Baltasar aseguró que la ampliación de toda esta área de protección, en este caso de las hectáreas que se integran como zona de la periferia del parque, "no debe suponer ningún problema ni ninguna traba" para la interconexión del dominio esquiable entre Vall de Boi y Vall Fosca, preocupación de algunos alcaldes.

De hecho, Luque aseguró que existen algunos dominios esquiables, con la instalación de algún remontador, en "zonas periféricas", pero advirtió de que todo ello "debe hacerse en ciertas condiciones" y "controlando que el impacto sea el mínimo".

A partir de ahora, la intención de la Generalitat es abrir el periodo de información pública, que se ampliará hasta "finales de octubre" para que todas las entidades puedan presentar sus alegaciones y "abrir un amplio proceso participativo", aseguró el conseller Baltasar.

APROBACIÓN PARA LA PRÓXIMA LEGISLATURA.

El conseller Baltasar defendió la propuesta de la Generalitat, al asegurar que es una opción "óptima" que "nos permitiría llegar a tocar el cielo". No obstante, reconoció que desde el Ejecutivo catalán, "no tenemos ninguna intención de que se apruebe en esta legislatura".

De hecho, la aprobación de esta propuesta debe pasar un largo proceso. En el caso de la ampliación de las hectáreas del propio parque, el Estatut de 1979 "obliga a que ello el decreto previamente aprobado por la Generalitat sea aceptado por el Gobierno o por el Congreso de Diputados", según Baltasar.

El nuevo Estatut, que entrará en vigor el próximo agosto, "permite que ello sea refrendado por la comisión bilateral que debe crearse entre el Estado y la Generalitat" y "posteriormente, ser aprobado por el Parlament de Catalunya", apuntó el conseller, quien aseguró que el Ejecutivo central "ha dado su visto bueno inicial" a la propuesta.

Para dar luz verde a la ampliación de las hectáreas de la zona periférica, sería necesario una ley aprobada desde el Parlament de Catalunya. Con toda seguridad, estos trámites se alargarán más allá del otoño, momento previsto para la convocatoria de las elecciones autonómicas en Catalunya.

CONFÍA EN QUE "NO HABRÁ MANIOBRAS POLÍTICAS PARA PARARLO".

Respecto a la posibilidad de que este proyecto no saliera adelante en la próxima legislatura, Baltasar aseguró que no trabaja "con ninguna otra hipótesis que suponga un cambio de Gobierno" y, en cualquier caso, confió en que "no habrá ninguna fuerza política que lleve a cabo ninguna maniobra para parar esto".

En este sentido, Luque aseguró que la propuesta de la Generalitat recoge, en algunos casos, "la totalidad de algunas de las peticiones que nos hicieron llegar ayuntamientos de la zona controlados por CiU, que reclamaban poderse integrar a la zona de protección del parque".