La Generalitat recortaría su déficit en 3.000 millones con un 15% de entidades menos, según la Cámara

Reclama al Estado que realice "íntegramente" las transferencias que corresponden a Catalunya

Miquel Valls
EP
Europa Press Catalunya
Actualizado: martes, 8 febrero 2011 14:18

BARCELONA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Generalitat puede recortar su déficit en 3.000 millones de euros reduciendo la dimensión del sector público un 15%, según los cálculos de la Cámara de Comercio de Barcelona, que alerta de que las entidades incluidas en el presupuesto de la Generalitat han pasado de 108 en 2006 a 224 en 2010, hasta suponer el pasado año un 42% del personal público y un 56% del gasto total.

El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, ha pedido al nuevo Govern que desarrolle el plan iniciado por la anterior Generalitat y que preveía la reorganización de 60 entidades, pero que vaya más allá con un plan "más ambicioso" que a través de supresión de entidades, fusión, integración o sustitución de consorcios por convenios de colaboración elimine duplicidades y mejore la eficiencia del sector público a medio plazo (horizonte 2014).

Asimismo, ha exigido al Gobierno central que cumpla con las transferencias que debe hacer a Catalunya según el nuevo modelo de financiación y el Estatut, por que si no hace entrega de estos recursos "íntegramente, Catalunya no podrá reequilibrar sus finanzas".

"Las finanzas catalanas están en un momento difícil porque necesitamos financiación urgente y el Govern debe elaborar los presupuestos más austeros de su historia, pero con voluntad, firmeza y rigor se podrá cumplir la reducción del déficit, siempre que el Estado cumpla con el nuevo sistema de financiación y del Estatut y no traspase competencias sin la correspondiente dotación económica", ha argumentado.

En esta línea, ha criticado que los Presupuestos Generales del Estado para 2011 prevén retrasar el pago del Fondo de Competitividad para las autonomías de este año hasta 2013, con lo que Catalunya dejará de recibir recursos pactados y el Estado "estará incumpliendo el modelo de financiación", que supone el 70% de los ingresos no financieros de la Generalitat.

Valls ha confiado en que la primera reunión entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, tenga continuidad con más encuentros y suponga "una colaboración más estrecha del Estado con la Generalitat", incluyendo que el Gobierno no obstaculice las emisiones de deuda del Ejecutivo catalán.

MÁS INGRESOS Y MENOS GASTOS

La Cámara remitirá este martes al Ejecutivo catalán una propuesta para conseguir cumplir el objetivo de déficit del 1,3% del PIB en 2011, basado en la 'triple A': austeridad, agilidad y adelgazamiento, ha repasado Valls, que ha puesto el ejemplo de que después de años de ir a gran velocidad, ahora toca reducir para ahorrar gasolina y "hacer sacrificios para ganar velocidad con menos consumo" a través de una administración más eficiente y ágil.

El medio para conseguirlo es "una reforma en profundidad de la gestión pública", después de que en los últimos cuatro años se hayan disparado costes como los de los alquileres (que se han duplicado en la Generalitat y se han triplicado en las entidades públicas) y los de personal (con una plantilla que ha crecido un 20,8%, mientras que la población total catalana lo ha hecho un 5,3%), según datos de la Cámara.

La entidad empresarial calcula que la reducción de 4.400 millones de déficit que se debe realizar este año debe venir por un aumento de los ingresos de 900 millones y una reducción del gasto de 3.500 "sin perjudicar significativamente la inversión productiva ni recortar las prestaciones sociales básicas".

En el capítulo de ingresos, el aumento de 900 millones vendrá dado por la mejora de la actividad y el cumplimiento "estricto" del nuevo modelo de financiación, y teniendo en cuenta la supresión del impuesto de sucesiones.

CONGELACIÓN SALARIAL, SUELDO POR OBJETIVOS Y MENOS SUBVENCIONES

En el capítulo de gastos, la Cámara aboga a corto plazo por medidas como reducir subvenciones "innecesarias" y transferencias públicas (avanzando hacia un sistema de financiación local menos dependiente de las transferencias autonómicas y estatales), así como congelar el sueldo del personal público, mientras que a medio plazo (hasta 2014) añade implantar el presupuesto de base cero y aplicar la remuneración por objetivos, además de la mencionada reorganización del sector público.

Valls ha defendido que Catalunya puede mantener el volumen de inversión de 5.400 millones de los dos últimos años si el Estado aporta los 759 millones de la liquidación de 2008 que marca el Estatut y asigna 400 millones que debe destinar a proyectos de inversión en 2011, mientras que la Generalitat solo deberá reducir los gastos de capital un 5%.

BALANCE 2010 Y PERSPECTIVAS

Valls ha destacado que el crecimiento de las exportaciones en 2010 ha sido el más elevado de los últimos 10 años, aunque aún no ha llegado a niveles de antes de la crisis, por lo que "es prioritario para las empresas catalanas continuar desarrollando la diversificación geográfica", ya que el sector exterior es el que ha permitido cerrar el año mejor de lo previsto, con una contracción del PIB del 0,2%, en vez del 0,5% que se esperaba por parte de la Generalitat y la Cámara de Barcelona.

También ha señalado como indicadores positivos la mejora de las inversiones en bienes de equipo y el aumento de pernoctaciones en el turismo (hasta un máximo histórico según los datos recopilados desde el año 2000), mientras que en el lado negativo "persiste" la dificultad de financiación y aumentan los precios energéticos, lo que encarece los costes de producción.

Según la encuesta de clima empresarial de Catalunya realizada por la Cámara, hay incertidumbre respecto a las perspectivas a corto plazo, aunque Valls ha confiado en que siga la tendencia de la recuperación y esta se consolide.

La Cámara calcula que el PIB catalán crecerá un 0,8% en 2011, en línea con las previsiones internacionales para España (entre el 0,7% y el 0,9%), pese a aspectos negativos como que continuará la caída del sector de la construcción y el consumo público.

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