BARCELONA 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Enseñanza de la Generalitat prevé ampliar de cara al próximo curso el número de escuelas que se han acogido al proyecto piloto para incluir guarderías en escuelas rurales, y que en su primer curso se desplegó en siete centros.
En una respuesta parlamentaria recogida por Europa Press, la consellera de Enseñanza, Meritxell Ruiz, ha valorado "muy positivamente" la experiencia piloto para atender a niños del primer ciclo de educación infantil.
Ha remarcado que el objetivo del departamento es favorecer el servicio del primer ciclo de educación infantil para las familias de entornos rurales que lo necesitan, y evitar que tengan que llevar a sus hijos a otros municipios y acaben trasladando toda la escolarización de estos fuera del pueblo o cambiar de domicilio.
La Conselleria ha firmado convenios de colaboración con los ayuntamientos en los que se establece que los consistorios se harán cargo de la dotación de un técnico de educación infantil.
Ha explicado que la Conselleria de Enseñanza ha recibido nuevas solicitudes de poblaciones pequeñas para poder iniciar esta experiencia en septiembre de 2016.
Fuentes del departamento han explicado a Europa Press que se prevé ampliar entre diez y 15 escuelas de cara al próximo curso, pero que todavía no está cerrado.
Enseñanza está estudiando también la posibilidad de poner en funcionamiento el servicio de comedor escolar en estos centros.
Ha precisado que la ratio de las escuelas rurales varía en función de las necesidades de escolarización, que son diferentes a las de los municipios con más población.
AYUDAS PARA MATERIAL ESCOLAR
En otra respuesta parlamentaria recogida por Europa Press, la consellera de Enseñanza ha explicado que en este curso 966 centros educativos recibieron una asignación para que puedan comprar libros de texto, los puedan dejar a sus alumnos y después reutilizarlos, material didáctico y licencias de libros digitales a todo el alumnado que no lo pueda adquirir a causa de la situación económica de su familia.
Se trata de una asignación a los centros que presentan "una complejidad especial derivada de un contexto socioeconómico desfavorable", y que durante el curso 2014-2015 recibieron 920, y que en este presente curso lo han hecho 966.