Isaki Lacuesta vuelve al "cine como retrato y forma de vida" en 'Entre dos aguas'

Isaki Lacuesta
BTEAMPICTURES
Actualizado: martes, 20 noviembre 2018 15:03

La película regresa a la historia de los hermanos Isra y Cheíto y se estrena el 30 de noviembre

BARCELONA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

El realizador catalán Isaki Lacuesta vuelve al "cine como retrato y forma de vida" en la ficción realista 'Entre aguas', que llegará a los cines españoles el viernes 30 de noviembre tras ganar una Concha de Oro en el Festival de San Sebastián y conquistar el Premio del Festival de Cine Mar de Plata el pasado fin de semana.

En una entrevista de Europa Press, Lacuesta ha celebrado acometer la "fantasía" de seguir con el proyecto iniciado con el filme 'La leyenda del tiempo' (2004), que cambió su forma de ver el cine y en que abordaba el paso de la niñez a la adolescencia de los hermanos Cheíto e Isra, un niño gitano que nunca podría cantar pese a pertenecer a una tradición de cantaores.

"Ese descubrimiento del cine como retrato y forma de vida, de poder vivir en un sitio y compartiendo, poderte meter en la cabeza de otra gente y transmitirlo al espectador son cosas que aprendimos haciendo la leyenda y que no formaban parte de mi hasta entonces", ha observado.

Si en 'La leyenda del tiempo' contaba cómo los hermanos dejaban de ser niños para pasar a ser adolescentes cómo crecían y cambiaban sin que fuera una cosa de maquillaje, peluquería y posproducción, sino que fuera una cosa real, ahora en 'Entre dos aguas' Cheíto regresa de una misión africana con la armada española e Isra sale de la cárcel tras ser acusado de tráfico de drogas.

Hace cinco años, el realizador y su equipo se dieron cuenta de que había pasado un lapso de tiempo suficiente para regresar a esta historia, teniendo en cuenta que Cheíto acababa de volver de una misión, mientras que el encarcelamiento de Isra es una ficción que encaja con realidades del barrio y la isla gaditana de San Fernando.

"Ese tipo de procesos que el cine puede captar es lo que buscábamos hacer", ha subrayado Lacuesta, que asegura que ambas películas se pueden ver por separado, aunque forman parte de un proyecto común.

Preguntado por si tiene intención de continuar con esta historia, el realizador ha admitido que la fantasía de seguir "se mantiene en parte sí y en parte no: es muy esquizofrénico", ha bromeado.

CÁRCEL, DROGA Y MUERTE

La cárcel, la droga y la muerte son algunos de los fantasmas que acechan a uno de los hermanos protagonistas, que resume con estas tres palabras su desasosiego en la isla: "En otro contexto parecería una frase muy peliculera, pero es muy cotidiana y en cambio está muy pegada al suelo".

"No tenía una vocación de denuncia ni de filmar lo marginal, pero sí en cambio quería hacer un contraplano de lo que los medios muestran: sí me interesa contar cosas que no son las más habituales", ha explicado Lacuesta, que ha reafirmado su cariño por San Fernando, isla de la que se enamoró y sobre la que quiso construir un proyecto cinematográfico.

"Con los años, al ir volviendo te das cuenta de que va apareciendo el drama, un drama que tú no buscas, pero que aparece porque las posibilidades de ellos cada vez son más pequeñas", lamenta.

EL DRAMA DE LA PELÍCULA

"Esos niños que tú has conocido y que te imaginas que pueden hacerlo todo en la vida porque tienen el potencial para hacerlo vas viendo que no, y ese destino que tienen predestinado solo por ser de un lugar se va cumpliendo inexorablemente y es terrible: el punto de drama de la película viene de ahí", ha observado.

La banda sonora y sonido realista de la película han sido concebidos dentro del mismo proyecto del filme, en que han trabajando Kiko Veneno y Refree y que, junto al equipo, han canalizado "cierto expresionismo emocional".