Ve al PSC en la "posición central adecuada" desde donde gobernar para todos
BARCELONA, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PSC a la Alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, ha advertido de que un alcalde independentista como el republicano Ernest Maragall supondría para la ciudad "bloqueo y sumisión al proceso independentista", ya que cree que ERC quiere pintar de amarillo Barcelona y ponerla al servicio del independentismo, dice.
"Quiero que la gente se imagine por un momento qué puede pasar en la ciudad si tiene un alcalde independentista con el apoyo de los comuns" y lo que supondría que ocurriera en la ciudad lo mismo que ha pasado los últimos años en la Generalitat, ha dicho en una entrevista de Europa Press.
Considera que el resultado de las generales demuestra que en las municipales se elige entre ERC y PSC --fueron los más votados y con poca diferencia, aunque las encuestas de las municipales apuntan a ERC y BComú como los más igualados--, y aspira a que los socialistas reciban tantos apoyos como en las generales.
Así, asegura que en estas elecciones se decide entre más proceso independentista o más Barcelona: "Aspiro a representar a esta Barcelona que quiere volver a ser Barcelona, que quiere ocuparse de los problemas de la gente y que quiere pasar página del conflicto y del mal gobierno".
Se presenta con voluntad de ganar, gobernar para todos y dialogar con todos excepto con los extremos, porque no quiere que la gobernabilidad dependa de ellos: "Mi posición es la de dialogar con todos los que planteen posiciones que sean extremistas y que pongan Barcelona por encima de todo".
Sostiene que el gobierno fuerte que quiere en Barcelona no depende sólo del número de concejales sino de la actitud del ejecutivo municipal para alcanzar acuerdos con la oposición y con sectores de la ciudad: "Se puede suplir la falta de concejales si se tiene esta capacidad, pero Ada Colau y su gobierno no la han tenido", y ha recordado que ella rompió el pacto de gobierno con el PSC.
"Hace falta diálogo, y el PSC tiene la posición central adecuada para hacerlo posible. Es el partido que más puede hacer el papel de centralidad política y, además, de interlocución privilegiada con el Gobierno de España", y ha añadido que el presidente del Gobierno y ganador de las generales, el socialista Pedro Sánchez, será aliado y amigo de la ciudad.
CRÍTICAS A VALLS
Sobre el alcaldable respaldado por Cs, Manuel Valls, ha dicho que llegó a Barcelona a probar suerte tras fracasar en Francia, y que en la ciudad ya ha empezado a fracasar: "Empezó a venir como una persona liberal o progresista, y ha acabado desfilando en la plaza Colón con Vox. Tiene un concepto de transversalidad política muy curiosa".
"La gente quiere un alcalde que sea cercano, que conozca la ciudad, que la quiera y crea en ella, y no que la utilice. Y creo que los independentistas quieren utilizarla para el proceso y otras personas la quieren utilizar para relanzar su carrera política personal", ha dicho.
Ha acusado a PP y Cs de ser "los grandes responsables de que Vox tenga un papel en la política española, porque lo han blanqueado", ha apoyado aislar a la formación, y ha criticado que la derecha ha emprendido un camino de radicalización y una competición para ver qué partido es más de derechas.
Se ha descrito a sí mismo como feminista y europeísta, porque quiere igualdad ante un problema de desigualdad que "la extrema derecha niega", y porque cree en la unión en la diversidad, cuando la extrema derecha amenaza la unidad europea con discursos populistas y xenófobos, ha dicho.
Sobre si en su política de pactos podrían influir los apoyos que necesite el Gobierno de Sánchez, ha respondido que, igual que no quiere subordinar la ciudad al proceso independentista, tampoco quiere subordinarla a otras lógicas: "El alcalde de Barcelona siempre debe defender la ciudad y a los barceloneses por encima de todo, gobierne quien gobierne en el Estado y en la Generalitat".
