Afirma que los encarcelamientos y la detención de Puigdemont dificultan la solución política
BARCELONA, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
El diputado de JxCat y expresidente de la ANC, Jordi Sànchez, ha afirmado que las reivindicaciones independentistas y las protestas por las detenciones a líderes soberanistas sólo deben ser pacíficas, y ha rechazado las "amenazas e insultos hacia jueces y adversarios políticos".
En una carta manuscrita desde la cárcel, facilitada por la ANC y recogida por Europa Press, se ha dirigido también a quienes expresan con violencia su indignación y dolor por las detenciones: "Me atrevo a pedirles que no se manifiesten y que se queden al margen de las movilizaciones ciudadanas".
Ha advertido de que los disturbios del domingo cerca de la Delegación del Gobierno en Catalunya fueron obra de mucha menos gente que las personas que se movilizaban pacíficamente por Barcelona en otra manifestación simultánea: la convocada por ANC y Òmnium Cultural.
"EL RELATO DE LA REPRESIÓN"
Sànchez ha insistido en que la imagen de los disturbios es "mucho más útil al relato que alguien quiere imponer que la imagen de la calle Marina", donde acabó la manifestación de ANC y Òmnium.
"No conduzcáis vuestro dolor hacia actos que justifican el relato de la represión" porque la violencia es estéril, ha dicho.
Y entiende el dolor e indignación de muchos, pero ha destacado que él sigue la no violencia pese a tener también razones para ese dolor e indignación, porque lleva cinco mesos y medio en la cárcel: "Vuestro dolor no es más que el mío, el del resto de encarcelados y de nuestras familias".
LOS LÍDERES SOBERANISTAS
Jordi Sànchez también lamenta la prisión dictada para el candidato a presidir la Generalitat, Jordi Turull, y otros dirigentes soberanistas, y la detención del expresidente Carles Puigdemont.
Los encarcelamientos hacen "saltar por los aires los incipientes puentes que se estaban construyendo" para iniciar la recuperación de la normalidad institucional, además de interferir en la investidura, según él.
Y la detención de Puigdemont "añade tensión y malestar, y objetivamente incrementa las dificultades a la solución política" que necesitan los catalanes, añade.
