El juez no impone medidas cautelares para un subinspector de Mossos pero le mantiene imputado

Actualizado: miércoles, 8 junio 2011 16:59

BARCELONA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona ha rechazado imponer ningún tipo de fianza para el subinspector jefe de anticorrupción de la Comisaría General de Investigación Criminal (CGIC), Antoni Salleras, al que mantiene imputado por presuntamente encubrir a un grupo de narcotraficantes vinculados a un confidente policial.

El sindicato Manos Limpias, que ejerce de acusación particular, pidió prisión provisional eludible con una fianza de al menos 10.000 euros para él, mientras que para los otros cinco mossos de la unidad de Salleras también imputados no reclamó medidas cautelares.

En el auto judicial, el juez justifica esta decisión en que no existe riesgo de fuga ni de ocultación de pruebas debido al tiempo transcurrido desde que ocurrieron los hechos, y asegura que "no existen indicios de que pueda darse reiteración delictiva pues en la trayectoria profesional del imputado no le constan actuaciones similares".

El juez imputa a Salleras y a otros cinco miembros de su unidad por presuntamente haberle ocultado conversaciones telefónicas relevantes, que no se transcribieron, y haber protegido al grupo de traficantes desviando su investigación hacia otros delincuentes del mismo entorno.

El magistrado atribuye a Salleras los delitos de omisión del deber de perseguir delitos, revelación de secretos, ocultación de documentos a la autoridad judicial, falsedad en documento público, obstrucción a la justicia, encubrimiento o bien tráfico de estupefacientes, y cree que alertó a la banda de que les estaban investigando.

En su auto, argumenta su decisión de imputarle porque, entre otras cosas, no se aportaron conversaciones entre los 'narcos' vinculados al confidente pese a que fueron "abundantes", no se hizo una investigación patrimonial de uno de ellos, no averiguaron los teléfonos 'B' utilizados por estos delincuentes para las conversaciones comprometedoras y no se solicitó la intervención de teléfonos de interés.

Asimismo, les reprocha que no indagaran quién era uno de los personajes que aparecían en las conversaciones, un tal Charly, que resultó ser un mosso que acabó imputado por estar a sueldo de la banda y que mantuvo un encuentro con Salleras, en la que el juez sospecha que pudo haberle dado información sobre la instrucción judicial.

DECLARACIÓN DE SALLERAS

En su declaración ante el juez el 25 de mayo, el subinspector defendió que su investigación sobre el grupo de presuntos narcos rozó la excelencia y confirmó que él era responsable del contenido de los informes que se remitían al juzgado.

También admitió haber almorzado y cenado en varias ocasiones con el confidente --sospechoso de liderar un grupo de narcos-- porque era un colaborador.

En su declaración, Salleras recalcó que no transcribieron algunas conversaciones porque en ese momento no tenían suficientes indicios para considerarlas relevantes, tal y como ya afirmaron los otros policías imputados que declararon varios días antes, y porque les faltaba el contexto.