Manuel Conthe dice al Parlament que es "una salvajada" obligar a rotular en catalán

El exdirector de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Manuel Conthe
PARLAMENT
Actualizado: martes, 11 octubre 2016 17:30

   Alerta de que la excesiva intervención pública "abona terreno" a la corrupción

   BARCELONA, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El exdirector de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Manuel Conthe, ha expuesto al Parlament que es "una salvajada" obligar a los comerciantes a rotular en catalán y ha asegurado, literalmente, que él lo haría en el idioma que le diera la gana por haber dos lenguas oficiales.

   Lo ha dicho este martes en su comparecencia en la comisión de estudio de medidas contra la corrupción para la regeneración democrática en la Cámara catalana, al hilo de su defensa de que existe un exceso regulatorio: "Que en Catalunya se sigan poniendo multas por no rotular en catalán es una salvajada".

   Conthe también ha defendido que una "intervención pública excesiva abona el terreno para la corrupción" y ha ahondado en la necesidad de que las instituciones promueven las regulaciones de forma más inteligente.

   "No basta con que el legislador benevolente vea un problema e intervenga", ha considerado Conthe, que ha avisado de que su mediación podría llegar a ser perjudicial si las medidas no son las adecuadas o si no se aplican correctamente.

   Ha dicho que, además de contra la corrupción, es necesario luchar también contra los gastos innecesarios de las Administraciones Públicas que "para los intereses de los ciudadanos pueden ser muy perjudiciales".

FINANCIACIÓN DE PARTIDOS

   Conthe ha destacado también que limitar lo que gastan los partidos políticos en las campañas electorales limitaría también su necesidad de recaudar y, por tanto, de financiarse incluso ilegalmente.

   "Hay que evitar esa necesidad de recaudar para tener más armas que el rival. Esa voracidad por tener más fondos", ha insistido el exdirector de la CNMV.

   También defiende la figura de los interventores como mecanismo de control de las Administraciones públicas y, sobre todo, que estos cargos no dependen jerárquicamente de quien tiene que ser evaluado: "Cuanto más se separe al supervisor del supervisado, mejor".

   Ha hecho mención también a evitar que las Administraciones lleven a cabo adjudicaciones directas y promuevan siempre procesos competitivos y ha defendido también la importancia de las denuncias, incluso las anónimas, para dar pistas a la hora de detectar infracciones.