Maragall pone su gobierno a disposición de Montilla, que incluirá en las listas a todos los consellers del PSC

BARCELONA, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat y del PSC, Pasqual Maragall, se puso hoy él mismo y su gobierno a disposición del candidato socialista a la Presidencia, José Montilla, para proseguir con su proyecto y liderar la legislatura del despliegue del Estatut.

Maragall presidió una reunión en un hotel de Barcelona cercano al Forum junto a Montilla y a la que asistieron todos los consellers del PSC --excepto Antoni Castells que se encuentra en Madrid reunido con el vicepresidente Pedro Solbes-- y en la que el candidato recibió información de primera mano de todos los proyectos que tiene en marcha el ejecutivo.

Montilla reafirmó su compromiso de defender la obra del Gobierno de Maragall y confirmó públicamente que todos los consellers del PSC estarán en las candidaturas para las elecciones catalanas del 1 de noviembre. "Cuento con todos y cada uno de vosotros, os necesito a todos", dijo, después de agradecer a Maragall su "apoyo y consejo" y a quien él ofrece "amistad y proyecto compartido".

Así, Montilla contará con Castells en el número 2, Montserrat Tura, que ocupará el 4; Carme Figueras, Ferran Mascarell, Jordi Valls y Jordi William Carnes en su candidatura por Barcelona. Mientras que Joaquim Nadal, Marina Geli y Manuel del Pozo irán en la lista de Girona. Xavier Sabaté será el cabeza de lista de Tarragona. Sólo quedará fuera por voluntar personal Josep Maria Vallès, que fue presidente de Ciutadans pel Canvi y que ya había anunciado su retirada.

A modo de reunión del Consell Executiu, con una senyera y un cuadro recordatorio de la Asamblea de Catalunya a la espalda, Maragall se dirigió al "compañero y amigo" 'Josep' Montilla para "agradecerle" que haya "asumido el proyecto y el legado de este gobierno" y esté "en condiciones de poner al día todos los proyectos que están en marcha". Para Maragall, "no se trata de hablar de herencias, sino de futuro" y sostuvo que el actual gobierno "abrió las puertas y ahora hay que entrar con ganas y fuerza".

Para Maragall, la Catalunya del nuevo Estatut necesita de un gobierno "fuerte" para aplicar el Estatut y el PSC debe ocupar "la columna central" de ese ejecutivo y estar "en sintonía" con "el que se va".

Para lograrlo, Maragall deseó "suerte" al candidato socialista y garantizó a Montilla, "ahora y después", "no sólo mi aportación personal, sino la de todos los consellers" que forman parte del "mejor gobierno que ha tenido Catalunya, por calidad, coherencia, homogeneidad, hoja de servicios y resultados obtenidos".

Maragall hizo balance ante Montilla de los logros de su gobierno más allá de la aprobación del Estatut comenzando por la reducción del déficit y el acuerdo estratégico para la internacionalización de la economía catalana, los 600 millones destinados a los barrios, el Plan Nacional de Educación, la política en Investigación, la reducción del déficit sanitario, el reconocimiento del catalán en la Unión Europea y la presencia internacional de la cultura catalana.

Para Maragall, todo ello supone un balance "sólido y consistente", "mucho más que el de las seis legislaturas anteriores y especialmente las dos últimas" de los gobiernos de Jordi Pujol. Tampoco olvidó los retos pendientes como la inmigración o la mejora de las infraestructuras del transporte y reiteró su voluntad de dedicarse a "la conexión" entre las dos riberas de Mediterráneo.

APROVECHAR LA OBRA HECHA E IR MÁS ALLÁ.

El candidato del PSC hizo un reconocimiento público de la acción de Gobierno de Maragall, agradeció el "buen trabajo hecho" y "constató" que "queda mucho por hacer". Montilla se comprometió a "defender la obra hecha como propia", tanto en el desarrollo del estatut como en la "orientación progresista de las políticas públicas" y para cuya aplicación "una legislatura de tres años es demasiado corta".

Montilla sostuvo que "no es el momento de dar marcha atrás y volver al victimismo y la autocomplacencia", sino que apostó por "aprovechar el trabajo hecho y llevarlo más allá".

La pretensión manifestada por el candidato es "aprovechar íntegramente el Estatut y ponerlo al servicio de la gente" para hacer de Catalunya "un país respetado y admirado por lo que hace y lo que es". Montilla auguró una "campaña difícil", "como todas las campañas del PSC" pero aseguró que "volveremos a luchar y volveremos a vencer".

La reunión estuvo plagada de gestos de complicidad entre Maragall y Montilla, con chistes incluidos por parte del presidente, que hizo hasta de fotógrafo para sus consellers.