BARCELONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Cultura, Ferran Mascarell, se mostró hoy partidario de que "a priori", los autores catalanes que escriben en castellano vayan a la Feria del Libro de Frankfurt porque Catalunya no puede "negar" una cultura presente en la realidad catalana.
En una entrevista a Catalunya Ràdio recogida por Europa Press, Mascarell pidió una semana para tener claro el "criterio" y "mecanismo de funcionamiento" de cara a la Feria de Frankfurt y aseguró que se tiene que explicar la cultura catalana "con claridad y sin confundir a nadie".
Sin embargo, Ferran Mascarell aseguró que la literatura en catalán tendrá un "lugar preminente, solo faltaría" por ser la que tiene "más dificultades", pero "sin negar otra realidad".
El nuevo conseller dijo que esta semana se dedicará a perfilar la Feria de Frankfurt y a orientar las directrices para que haya un "equipo homogéneo" en una preparación en la que no sólo interviene el Institut Ramon Llull --en el que confirmó a Emili Manzano como nuevo director--, sino también los editores.
Días después de su nombramiento como conseller de Cultura, Mascarell dijo que "no" se sentía predestinado a ser el titular del departamento, aunque admitió que "siempre ha trabajado en este ámbito tanto como editor, en la SGAE o el Ayuntamiento de Barcelona".
Mascarell dijo que aportará todo lo que pueda "sumar" y remarcó la "notable potencialidad" de la cultura catalana como una de sus principales "señas de identidad". El conseller abogó por "expansionar" esta potencialidad ya que, en su opinión, Catalunya lleva "unos cuantos años de mirada tímida sobre nosotros mismos que también ha impregnado las políticas culturales".
El conseller de Cultura afirmó que Catalunya, pese a ser "un país pequeño en cuanto al número de habitantes", no ha de tener "complejos en tener una cultura plena y desarrollada" y aseguró que esa "es la trampa que tendríamos que intentar destruir".
Uno de los ejes de la política cultural catalana ha de ser la "internacionalización" y la capacidad de su cultura de "interactuar" y "tener flujos fuertes y rotundos cara al mundo", ya que, si no, se cae en el peligro de hablar de una cultura "antigua y con mirada arqueológica".
Para Mascarell, lo que hay que evitar es que, por ejemplo, se estrene en Catalunya un espectáculo de danza "y muera a los tres días" por falta de circuito. El conseller aseguró que Catalunya tiene "mucha creatividad, pero tienen dificultades de mercado" y abogó por intentar estar más presente en el mercado español, latinoamericano y europeo.
El nuevo conseller dijo que el hecho de que Catalunya no tenga un estado propio no ha de ser un problema para la cultura, porque ésta la hace la sociedad. Mascarell señaló que "el Estado no ha inventado a Dalí o Tàpies" y que Catalunya ha tenido suerte de "configurar por instinto" una configuración cultural.
Mascarell remarcó que el hecho de que no se escuche con normalidad temas en catalán de Joan Manuel Serrat responde más a "debates identitarios y reminiscencias ideológicas" que a "problemas de mercado".
La solución, para Mascarell, es "entender" que el mundo se está dirigiendo hacia la "diversidad cultural" y destacó que "quien no quiera entenderlo, estará en la retaguardia".
EXITO DE SANT JORDI.
Finalmente, el conseller se refirió al éxito de la Diada de Sant Jordi, en la que miles de catalanes salieron a la calle para comprar rosas y libros. Mascarell, quien también firmó ejemplares de su libro 'La cultura en la era de la incertidumbre', aseguró que "libreros y editores estaban contentos" con las ventas de un "buen Sant Jordi".
Mascarell no se mostró sorprendido del éxito de 'La catedral del mar' de Ildefonso Falcones y la definió como "una novela de las de antes, que engancha". El conseller dijo que "el boca-oreja" ha hecho mucho en el tremendo tirón de la novela.
