Miquel Iceta, un histórico del PSC para recuperar la solidez perdida del partido

Miquel Iceta en su llegada al Comité Federal del PSOE en Madrid
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 14 octubre 2016 18:12

38 años de militancia al servicio de que el socialismo catalán vuelva a relucir

BARCELONA, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta i Llorens (Barcelona, 17 de agosto de 1960) busca este sábado renovar por cuatro años su cargo de líder del partido con el reto de que la formación vuelva a crecer electoralmente tras años de reveses en las urnas.

Iceta asumió el mando del PSC por primera vez el 13 de julio de 2014, tras la dimisión de Pere Navarro y al vencer unas primarias sin rival, y ha logrado el principal reto que entonces se le encomendó: recoser un partido marcado por las escisiones y frenar la pérdida de votos.

Así, su principal acierto ha sido devolver a una relativa estabilidad al partido, pero no ha conseguido resolver la gran incógnita: si podrá devolver al PSC a las cotas de poder tanto municipal como autonómico que obtuvo en la primera década de este siglo.

El apogeo electoral del PSC llegó en 2003, cuando se hizo con las riendas de la Generalitat al lograr 42 diputados en el Parlament y más de un millón de votos; desde entonces, un descenso vertical hasta los 16 parlamentarios y los 523.000 votos actuales.

Iceta ha resituado el discurso del PSC sobre el 'derecho a decidir' hasta convertirlo en cómodo para todo el partido: rechazo frontal a una consulta de autodeterminación y una gran defensa de la reforma constitucional y de una referéndum para validarla.

El principal problema es que esta reforma no ha pasado de ser una declaración de principios, ya que no ha encontrado nunca apoyos para empezar a caminar ni en el Congreso de los Diputados ni el Parlament.

DE TIERNO GALVÁN A LA MONCLOA

El interés de Iceta por la política nació aún siendo menor de edad, cuando con 17 años empezó a militar en el Partit Socialista Popular Català, la sección catalana del PSP de Tierno Galván, una formación que en seguida dejaría por sus divisiones internas para entrar a formar parte en 1978 en la Juventudes Socialistas de Catalunya.

En unos escasos seis años de militancia ya era miembro de la Ejecutiva del partido (1984), un selecto club que no dejaría hasta el 2011, cuando Pere Navarro prescindió de él como dirigente, aunque le encargó la tarea de dirigir la Fundación Rafael Campalans y eso, a la práctica, también le permitió acudir a las reuniones de la dirección cuando quería, aunque sin derecho a voto.

Iceta empezó su trayectoria institucional en el Ayuntamiento de Cornellà (1987-1991), para dar luego el salto a la Moncloa como director del Departamento de Análisis del Gabinete de la Presidencia del Gobierno (1991-1995), subdirector del mismo gabinete (1995-1996) y diputado por Barcelona en Las Cortes (1996-1999).

Su paso por Madrid reforzó sus contactos con el PSOE, hasta el punto que le convirtieron en uno de los principales nexos con el PSC, sobre todo cuando ha habido que abordar temas espinosos como el Estatut o el derecho a decidir.

Prueba de su capacidad de influencia en el PSOE la dio Alfredo Pérez Rubalcaba en un Comité Federal de enero de 2013, cuando las relaciones con el PSC eran más tensas que nunca por la consulta; Rubalcaba admitió que los partidos tenían discrepancias y que el 'derecho a decidir' era un problema que los alejaba y que no lo arreglaría "ni Iceta".

BAILES Y 'HAIKUS'

Diputado en el Parlament desde 1999, en 2011 ya intentó liderar el partido fracasando en su intento, una asalto que volvió a intentar en 2014 sin rival, ya que como él mismo se encarga de recordar, nadie quiso asumir las riendas de un partido inmerso entonces en una situación más que delicada.

Iceta es conocido por ser un lector empedernido, por su afición a tuitear cada día un 'haiku' --un tipo de poema de origen japonés-- y por sus mítines apasionados que le han llevado desde a marcarse un baile hasta invocar a Dios.

Fue célebre su baile 'Don't Stop Me Now' de Queen en el mitin de apertura de la campaña de las catalanas o su apoyo a gritos a que Pedro Sánchez intentara un gobierno alternativo al PP en la última Fiesta de la Rosa: "Mantente firme, aguanta las presiones y líbranos de Rajoy y del PP. ¡Por Dios!".

La relación con el PSOE será otro de sus principales retos ya que se avecina un pulso: se niega a investir a Rajoy con la abstención, precisamente cuando este es uno de los escenarios que cobra fuerza en el partido que ahora lidera Javier Fernández.