BARCELONA 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los grupos municipales de Barcelona han ofrecido al alcalde Jordi Hereu su apoyo para la venta del 36% de Serveis Funeraris de Barcelona (SFB) a la compañía Mémora y lograr que el mayor grupo funerario de España se traslade a la capital catalana, según fuentes de los diversos grupos consultados por Europa Press.
Hereu ha condicionado la convocatoria del concurso por SFB al consenso de todos los grupos, que tiene asegurado por parte de todos los partidos de la oposición (CiU, ERC y PP), mientras que su socio de gobierno, ICV-EUiA, optaría por abstenerse.
El grupo Mémora ha anunciado su intención de trasladar de Madrid a Barcelona su sede social e invertir 110 millones si logra la mayoría del capital en la compañía mixta SFB, del que ya controla el 49% y el Ayuntamiento el 51%.
La operación cuenta también con el visto bueno de los sindicatos y trabajadores, cuyo portavoz, Octavi Vidal, ha alertado a Hereu de la pérdida de empleo si no se materializa la operación y ha considerado que en época de crisis no se pueden perder oportunidades de este tipo.
Fuentes del Gobierno municipal consultadas por Europa Press han reiterado que la operación sólo prosperará con consenso político, y han rechazado que se impulse en el marco del Plan de Ajuste de Hereu para recortar déficit.
Desde la oposición creen que falta "valentía" en el bipartito para aceptar la operación y sólo la condicionan a que Mémora se traslade a Barcelona, a que un pequeño porcentaje de la funeraria se lo quede el Ayuntamiento o empresarios privados catalanes y a garantizar las tarifas sociales en los entierros.
Fuentes de la formación de Xavier Trias (CiU) explicaron que la privatización de la funeraria forma parte de su programa electoral desde 1995, mientras que el líder del PP, Alberto Fernández Díaz, rechaza que el Ayuntamiento actúe como un socio privado y dará el 'sí' definitivo si se garantiza el servicio a la ciudadanía.
En declaraciones a Europa Press, el líder municipal de ERC, Jordi Portabella, defendió que la sede de Mémora vuelva a la capital catalana para "convertirse en una multinacional con sede en Barcelona", y ha pedido al ayuntamiento que un 15% sea de socios catalanes para que "la sede se quede en las próximas décadas".
Por su parte, desde ICV admiten que no rechazarían de plano la operación y se abstendrían dada la importancia de la inversión para la ciudad y el apoyo de los trabajadores a la misma.
De los 110 millones que ha comprometido Mémora, 60 millones se destinaría a la adquisición del 36% del paquete del 51% que actualmente tiene el Ayuntamiento en SFB --que gestiona los cuatro tanatorios de la ciudad--, y el resto a nuevas adquisiciones.
Como contrapartida, el consistorio recuperaría el 100% de la propiedad de Cementiris de Barcelona, que gestiona los camposantos del municipio. SFB emplea a 220 trabajadores, más los puestos indirectos.