BARCELONA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Pedrera de Barcelona ha presentado este lunes una exposición con 200 imágenes del fotógrafo catalán Francesc Català-Roca, un fondo que muestra el "testimonio silencioso" del artista en el ámbito de la fotografía documental de los años 50 y 60, así como una colección de imágenes de arquitectura, faceta más desconocida para el gran público.
La retrospectiva recoge el trabajo del fotógrafo a lo largo de toda su trayectoria y presenta un 30 por ciento de fotografías inéditas, relacionándolas con diversas características de su estilo personal: la importancia del instante decisivo, la mirada selectiva, el testimonio silencioso y la arquitectura, entre otras.
El comisario, Chema Conesa, ha realizado una visita guiada a la muestra en la que ha destacado que Català-Roca "tenía mentalidad de periodista en cuanto testigo ausente de la realidad y en tanto que escogía subjetivamente qué era lo más importante".
A lo largo del recorrido, el visitante podrá observar fotografías de marineros de visita al 'barrio chino' de Barcelona, familias paseando por la feria de Santa Llúcia, seminaristas en la plaza mayor de Cuenca, así como imágenes irónicas como la que muestra a una monja ante un cartel que anuncia un baile de disfraces.
"Català-Roca se adelantó intuitivamente a Henri Cartier-Bresson en sus postulados sobre el 'instante decisivo", ha señalado Conesa, que ha explicado que el catalán construía la imagen como fruto de la decisión y la oportunidad de disparo, consiguiendo unir la verdad del documento con la belleza de la imagen.
Los disparos que realizaba el fotógrafo muestran imágenes tan curiosas como la del pintor Salvador Dalí saltando a la comba con unas niñas, un joven piropeando a dos bellas mujeres en un paseo de Sevilla y el artista Joan Miró --de quien fue gran amigo-- trabajando en su estudio.
El comisario ha explicado que a Català-Roca le gustaba jugar con las miradas y tenía la teoría de que "menos es más", por lo que la fuerrza de sus fotografías reside en los detalles de lo retratado, y en lo directo e impulsivo de su obra.
Como fotógrafo colaborador de publicaciones como 'Revista', la editorial Destino y la Dirección General de Turismo, se acercó al periodismo por su dedicación a sustraer imágenes artísticas de la realidad más cotidiana, y su intento alejarse de cualquier tipo de manipulación.
LA GEOMETRÍA ARQUITECTÓNICA
La parte final de la exposición está dedicada a la fotografía arquitectónica, que ocupó un lugar muy importante en su carrera y que destaca por "el valor de la geometría, del juego de luces y sombras, la perspectiva y los contrapicados", según ha explicado Conesa.
Se recogen imágenes de edificios barceloneses como el Col·legi d'Arquitectura de Barcelona, la facultad de Economía y Empresa, el Hotel Park, el Instituto Francés y el Canódromo de la Meridiana, así como el proyecto Walden 7 de Ricardo Bofill, situado en Sant Just Desvern.
La exposición podrá verse entre este martes y el 25 de septiembre, está organizada por la Obra Social de CatalunyaCaixa y cuenta con la colaboración de la editorial La Fárica, la Fundació Barrié y el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya, dipositario de los más de 180.000 negativos que forman el archivo Català-Roca.
