BARCELONA 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La plantilla de Frape Behr, filial española del grupo automovilístico alemán Behr dedicada a productos de transferencia térmica, acusó hoy a la dirección de la empresa de "mentir" sobre la situación económica de la planta de la Zona Franca (Barcelona), cuyo cierre anunciaron el pasado viernes.
En declaraciones a Europa Press, el miembro del comité de empresa Manuel Morales, explicó que, tras recibir esta mañana el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a la totalidad de la plantilla (295 personas), los trabajadores no descartan realizar "las movilizaciones oportunas" para asegurar la continuidad de la factoría y el mantenimiento de todos los puestos de trabajo.
Morales aseguró que la empresa "no pierde dinero en Barcelona", sino que apuntó a que "lo que quieren es ganar más". Asimismo, el portavoz del comité sostuvo que el plan de la compañía, que prevé el cierre de la fábrica barcelonesa para centrar la producción en la planta de Montblanc (Tarragona) y dejar en Barcelona sólo el I+D, implicará que, si algún trabajador tuviera opción a trasladarse, trabajaría en unas condiciones "mucho peores".
En este sentido, Morales denunció que en la fábrica de Montblanc no sólo son más reducidos los salarios, sino que se dan situaciones como que un empleado no tiene trabajo un día y le piden que recupere esas horas en el fin de semana, "mandando la planificación familiar al garete".
LA EMPRESA INCUMPLE SU COMPROMISO.
Asimismo, el miembro del comité de empresa recordó que con el anuncio del cierre de la planta productiva en Barcelona, la compañía "incumple" el compromiso adquirido en 2004, por el cual los trabajadores aceptaron una congelación salarial de dos años y un aumento de los tiempos de producción a cambio de que Frape Behr asegurase su permanencia en la Ciudad Condal más allá de 2008.
"Después de los grandes sacrificios de los trabajadores por la continuidad de la empresa, el cierre es una noticia tremenda", aseguró Morales, y advirtió de los efectos "socialmente terribles" que comportará el despido de los 295 empleados.
La decisión final de Frape Behr de cesar su actividad en la Ciudad Condal se produce, según el portavoz de los trabajadores, tras la reunión de la semana pasada en la que "la empresa se negó a cualquier negociación".
Tras recibir formalmente el ERE, el comité lo hará llegar a sus asesores para valorar qué medidas, a parte de posibles manifestaciones, promoverán para "salvar la fábrica" y a los trabajadores.