GIRONA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El juicio contra Josep T.A. por el asesinato de una joven prostituta albanesa cometido en abril de 2003 se reanudó esta mañana con el inicio de las pruebas periciales durante la investigación del crimen. Los primeros en declarar fueron los agentes de los Mossos d'Esquadra de la unidad de investigación científica, los cuales, a partir de las muestras de sangre recogidas, afirmaron que encontraron sangre de la víctima en todas las habitaciones del piso de la calle Orient de Girona, donde presuntamente se cometió el asesinato.
Los agentes también declararon que la localización de las manchas de las paredes se encontraban, principalmente, a partir de la cintura hasta arriba y que la cocina y el recibidor fueron los lugares donde más restos de sangre de la joven Vjollka Papa se encontraron. No sólo encontraron sangre en las paredes, según los mossos, sino incluso debajo de las baldosas y en una lámpara que colgaba del techo.
Además, añadieron que las muestras recogidas mostraban que alguien había intentado sacar las manchas de la pared lijando. De hecho, el inculpado reconoció que días después de haber sufrido una agresión, según él, en la cual tres magrebís llevaron a la chica, pintó las paredes de parte de la casa. A pesar de ello, como han declarado agentes que participaron en la detención y hoy los de la unidad científica, las manchas de sangre eran igualmente perceptibles.
Por su parte, los peritos del Instituto Nacional de Toxicología (INT) de Madrid aseguraron que la víctima, que murió de un corte en el cuello y seis golpes en la cabeza, fue asesinada con "mucha violencia" y añadieron que el agresor le "desmenuzó el cráneo" con un objeto contundente.
Josep T.A., de 64 años, se enfrenta a una acusación de asesinato, por la cual la acusación particular pide 21 años de prisión, y a 17, que solicita el fiscal por homicidio. El imputado ya fue condenado en 1991 a 20 años de prisión por el asesinato de una menor de 14 años de Sant Hilari Sacalm (Girona). La chica era vecina de Josep T.A. y trabajó en el taller del acusado antes que éste la matara en 1987. Además, Josep T.A. abusó sexualmente de la adolescente.
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