Medio Ambiente dice que el Consorcio se precipita al valorar la medida acordada por el Govern
BARCELONA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Consorcio Forestal de Catalunya (CFC) exige la dimisión del conseller de Medio Ambiente y Vivienda de la Generalitat, Francesc Baltasar, a raíz de la decisión acordada esta semana por el Govern de disolver el Centro de la Propiedad Forestal (CFP), en el marco del plan de racionalización de la administración previsto para contener el déficit público.
En una entrevista con Europa Press, el presidente del CFC, Josep Maria Vila d'Abadal --también alcalde de Vic (Barcelona)--, lamentó la eliminación de un órgano con más de 20 años de historia, que ha permitido "vehicular" la relación entre los propietarios privados y la Conselleria para mejorar la gestión de las masas de árboles en Catalunya de una forma "vital".
Vila d'Abadal se preguntó quién sería el interlocutor de los propietarios cuando la medida se haga efectiva, al tiempo que aseguró que ya no creen en las "miles de promesas" hechas por Baltasar para mejorar la gestión de los bosques, puesto que la eliminación del Centro de la Propiedad supone un paso más en las "políticas erráticas" llevadas a cabo.
El CFC, que engloba a los 7.000 dueños catalanes con más de 25 hectáreas en propiedad y a los 40.000 que tienen menos, tiene condición de entidad de derecho público desde la aprobación de la ley 7/1999 del Parlament, por lo que su presidente consideró indispensable que la supresión pase de nuevo por la cámara catalana. En caso contrario, anunció que estudian interponer un recurso contencioso-administrativo contra esta decisión.
La Conselleria de Medio Ambiente, también en declaraciones a Europa Press, consideró por su parte que Vila d'Abadal "se ha precipitado" en sus críticas, puesto que la próxima semana está previsto un encuentro entre el departamento y el consorcio para analizar la situación actual.
El proyecto del Govern prevé la integración de las funciones del CFC en la Conselleria, aunque Vila d'Abadal aseguró que Baltasar ya ha intentado en el pasado suprimir este organismo, cuando el centro ha desarrollado un "gran trabajo" en la mejora de la gestión gracias a la implicación de los propietarios.
Catalunya cuenta con 1,93 millones de hectáreas de superficie forestal, de las que el 78,3 por ciento está en manos privados --1,51 millones de hectáreas--, según las cifras facilitadas por el CFC correspondientes al tercer inventario realizado.
LOS EFECTOS DEL TEMPORAL
El presidente del CFC aseguró además que la supresión del organismo en un momento como el actual es "especialmente grave", cuando los bosques todavía "están igual" desde los temporales de 2009 y marzo de 2010, dado al poco tiempo que han tenido para emprender las mejoras necesarias, más allá de caminos y puntos de abastecimiento de agua.
Por ello, se preguntó quién otorgará a partir de ahora los certificados de gestión sostenible para vender la madera, dónde se consensuarían las actuaciones futuras y qué pasará con los 3.500 planes de gestión vigentes que engloban el 30% de los bosques privados, entre otros aspectos. "Desde principios de los años 90 los bosques dejaron de ser rentables", aseguró.
Vila d'Abadal consideró que arreglar los bosques en detalle costaría 20 años, y ello solo desde la creación de un marco estable que genere confianza entre los propietarios. Por contra, desde hace una década la madera se acumula en los bosques catalanes, ya que a pesar de producir anualmente tres millones de metros cúbicos, tan solo se explotan comercialmente 700.000, aseguró.
Baltasar señaló esta misma semana que ya están ejecutadas el 80% de las actuaciones previstas para mejorar el estado de los bosques antes de la campaña de incendios del verano, que sin embargo se prolongarán más allá del 15 de junio, y precisó que en total se han invertido 43,5 millones de euros para trabajos de prevención y subvenciones.
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