BARCELONA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los proyectos de economía social y solidaria en la ciudad de Barcelona representan el 6% del PIB y generan un 8% del total de la ocupación de la ciudad, según un informe encargado por el Ayuntamiento.
En Barcelona existen unas 4.800 experiencias de economía cooperativa, social y solidaria, un sector que agrupa iniciativas relacionadas con la salud, la educación, la cultura y las telecomunicaciones, entre otros, ha informado este martes el consistorio en un comunicado.
Gran parte de estas iniciativas se mueven en el cooperativismo --de trabajo, consumo, servicios, educación y vivienda--, las sociedades laborales, el "mutualismo" y el tercer sector social, iniciativas que combinan estructuras profesionalizadas con los principios de la propiedad colectiva, gestión democrática, responsabilidad social y socialización de los excedentes.
En este sentido, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha querido mostrar este martes su apoyo a la experiencia de la Masia Can Calopa de Dalt, que gestiona la cooperativa L'Olivera, y que trabaja para favorecer la integración social de personas con discapacidad a través de la cosecha de la viña, la producción de vino, y proyectos como el antiguo mercado de Vallvidrera.
El objetivo del consistorio es reforzar y mejorar la viabilidad económica de las iniciativas impulsadas desde el sector de la economía solidaria que contribuyan a crear trabajo "arraigado y próximo" y que, al mismo tiempo, faciliten y promuevan la sostenibilidad y la integración social de colectivos vulnerables.
PROYECTO EN VALLVIDRERA
El Comisionado de Economía cooperativa, social y solidaria y consumo del Ayuntamiento ha señalado que uno de los puntos "emblemáticos" del eje montaña de Collserola podría ubicarse en el antiguo mercado de Vallvidrera, ya que la Associació Cultural del Mercat de Vllvidrera --formada por una docena de entidades y colectivos-- ha presentado un proyecto de viabilidad basado en un modelo de gestión cívica de este espacio.
Para hacerlo posible, el distrito de Sarrià-Sant Gervasi ha encargado un anteproyecto y estudios previos para poder impulsar la reforma del mercado, ya que el consistorio y las entidades entienden este equipamiento cultural como un espacio de "socialización ciudadana y democratizador de la cultura".
El contenido de esta noticia está elaborado en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona