BARCELONA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La portavoz adjunta del PSC en el Parlament Rocío Martínez-Sampere ha augurado este miércoles la abstención del PP en los presupuestos de 2012, lo que permitirá que se aprueben gracias a su "pacto estable" con CiU.
"El Govern no ha querido hablar ni con nosotros ni con otros grupos. Se consolida, por la vía de los hechos, una coalición de gobierno entre CiU y PP. Lo vemos desde el primer día", ha lamentado en rueda de prensa en la Cámara catalana, donde les ha recriminado que simulen la negociación cuando, a su juicio, la decisión ya está tomada.
Para la dirigente socialista, la federación y los populares están protagonizando una "mala comedia", y ha cuestionado que el Govern presuma de geometría variable cuando es inexistente para ella.
CiU pacta con el PP porque es con quien tiene más "afinidad", aunque ha considerado que no es la elección más conveniente para las necesidad y aspiraciones de los catalanes, ha dicho.
"Cada vez que CIU y PP se entienden, la mayoría de catalanes pagamos más. Pocos catalanes pagan menos, pero las clases medias y trabajadoras pagan más. Y el país no va mejor, sino peor", ha sentenciado.
Los socialistas, que han presentado 728 enmiendas a las cuentas y 57 a la ley de acompañamiento, han vuelto a tender la mano para contribuir a una salida "más equitativa" de la crisis, sin que ello signifique dar un cheque en blanco al Govern.
También ha reprochado a la federación que presente nuevas tasas como la del incremento del agua vía enmiendas a la ley de acompañamiento sin incluir memorias económicas ni informes al respecto con el único objetivo de "compensar" sus acuerdos con el PP sobre la tasa turística y el euro por receta.
RENUNCIA DE MAS
Esta relación con el PP provoca que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, no tenga una actitud de exigencia frente al Gobierno de Mariano Rajoy, algo que se visualizó en su primer encuentro en La Moncloa, ha apreciado.
Para Martínez-Sampere, Mas fue a Madrid a apoyar al Gobierno: "Imaginad que José Montilla hubiera ido a Madrid a apoyar a Zapatero. Los apoyos al Gobierno se escenifican en el Congreso, pero un presidente de la Generalitat cuando se reúne con el del Gobierno va a reclamar y exigir cosas para Catalunya, y ello no lo vimos".
Según la diputada, hay un abismo entre las declaraciones y las acciones que emprenden CiU y el Govern, destacando que primero levantan la bandera del soberanismo y luego la bajan en el día a día dejando caer apuestas estratégicas en materia aeroportuaria, industrial, económica y social.
El pacto fiscal es un ejemplo de esta situación, según Martínez-Sampere, quien ha recordado que el sistema de financiación deberá renegociarse en 2013 y que los socialistas catalanes apuestan por un pacto federal.
Pese a las diferencias, ha asegurado que el escenario está abierto y hay posibilidad de llegar a acuerdos siempre que todas las partes estén dispuestas a ceder.
