BARCELONA 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los resultados educativos de los alumnos catalanes han ido mejorado progresivamente de 2008 a 2012 por las nuevas políticas de enseñanza implantadas y el esfuerzo del profesorado, si bien esta inercia puede frenarse si no se invierte en educación de forma equitativa para paliar la desigualdad de los estudiantes más vulnerables.
Lo han explicado en la presentación del Anuario del Estado de la Educación 2013 de la Fundació Jaume Bofill, dedicado al análisis de la evolución de la educación en Catalunya, los directores del proyecto, Miquel Martínez y Bernat Albaigés, acompañados por el director de la fundación, Ismael Palacín, quien ha apuntado que "la revolución estará en invertir más en centros con resultados más bajos".
Los indicadores que evidencian la mejora de los resultados --que son globales-- son el aumento del número de alumnos que se gradúan al finalizar la Secundaria --del 79,8% al 82,3%--; la reducción del abandono escolar --del 33,2% al 24%, cuando para la UE el deseable es el 15%--; la tasa de idoneidad a los 15 años --del 69,4% al 72%--, y la población de 34 años con estudios superiores --del 41% al 41,8%--, entre otras cifras.