Tres detenidos por intentar estafar a varias personas en Tarragona con el método de los 'billetes tintados'

Actualizado: martes, 28 agosto 2007 16:56

TARRAGONA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) detuvieron el pasado miércoles a tres personas que presuntamente habían intentado estafar a cuatro personas en Tarragona utilizando el método de los 'billetes tintados', que consiste en vender un producto químico que supuestamente duplica los billetes de curso legal.

Según informó hoy la Policía, el martes los investigadores de la comisaría de Tarragona supieron que en un hotel de la ciudad se habían alojado tres personas presuntamente especializadas en este timo y localizaron a cuatro posibles víctimas de intentos de estafa.

Los agentes arrestaron a los tres presuntos timadores, a quienes se les intervinieron los útiles necesarios para realizar la estafa, entre otros, líquidos, papel de aluminio y una linterna de luz ultravioleta. Los detenidos son E.M., de origen camerunés y 32 años; D.D.E., de origen camerunés y 34 años; y P.E., nigeriano de 30 años.

A la hora de cometer este tipo de estafa, uno de los timadores ejerce de 'gancho' y, mostrándose de forma ostentosa, capta la confianza de su futura víctima. Posteriormente, le dice que forma parte de una organización que tiene una máquina que, tras un procedimiento químico, permite duplicar los billetes.

El estafador queda entonces con su víctima para hacerle una demostración, momento en el que entran en juego sus compinches. Los timadores introducen un billete de curso legal entre dos recortes de papel del mismo tamaño y, tras manipularlos con unos reactivos químicos, consiguen que se transformen en dos billetes del mismo valor que, aparentemente, son de curso legal.

Tras la demostración, los estafadores se citan de nuevo con la víctima, que se presenta con una importante cantidad de dinero. Los timadores someten los billetes al falso proceso de duplicado y, sin que la víctima se dé cuenta, cambian los fajos de billetes buenos por otros del mismo tamaño y grosor.

Acto seguido, le informan de que tienen que pasar unas horas para que el líquido que han aplicado a los falsos billetes surta efecto y aprovechan ese tiempo para desaparecer con el dinero que se les ha entregado a cambio del producto.

En este caso, dos de los detenidos se encargaban de la demostración y el tercero ejercía de contacto en Tarragona para darles apoyo y ofrecerles información sobre posibles víctimas.

Los arrestados pedían unos 9.000 euros a sus víctimas para las demostraciones, aunque en algunos casos se conformaban con 3.000. Los timadores, sin embargo, no consiguieron su objetivo, ya que las personas que sufrieron el intento de estafa no les dieron cantidad alguna.