Publicado 29/08/2020 18:25

CSIF advierte del peligro en la cárcel de Melilla tras el ingreso de 33 amotinados sin pruebas de Covid-19

Un trabajador sanitario protegido sostiene una de las probetas utilizadas para la realización de tests PCR
Un trabajador sanitario protegido sostiene una de las probetas utilizadas para la realización de tests PCR - Ricardo Rubio - Europa Press

MELILLA, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

El sindicato CSIF-prisiones ha manifestado este sábado "su preocupación" por los 33 inmigrantes que el viernes ingresaron en la prisión de Melilla, como consecuencia del intento de motín ocurrido el pasado miércoles en el Ceti. La organización ha advertido que a dichos inmigrantes "no se les ha realizado ningún test del Covid-19 antes de su ingreso, con el consiguiente riesgo sanitario tanto para el personal funcionario como los propios internos".

A través de un comunicado de prensa, CSIF ha asegurado que el Centro Penitenciario de Melilla "no está preparado para recibir en un solo día un incremento de la población reclusa en un 12%". En este sentido, ha detallado que "solo se disponen de dos celdas americanas en el módulo de ingresos para alojar a un máximo de seis internos".

Por ello, CSIF-prisiones ha urgido a una mayor coordinación entre la Administración de Justicia y la Dirección de la cárcel "para poder prepararse ante tal avalancha de ingresos tanto por la propia seguridad del Centro Penitenciario como por la seguridad sanitaria que nos enfrentamos por el COVID-19".

Al respecto, ha revelado que la Guardia Civil "tuvo que permanecer en el centro hasta las 19:30 hasta que se pudo identificar a todos los internos, con tal despropósito que la Guardia Civil tuvo que recurrir a los ficheros del CETI para poder terminar de identificar a algunos inmigrantes".

Asimismo, ha denunciado que "fue tal el desbordamiento que se produjo que hubo que recurrir urgentemente a proveedores para suministrar colchones, sábanas, almohadas".

CSIF-prisiones ha solicitado que se realicen las pruebas PCR a los 33 internos, así como a todos los que estuvieron en contacto el viernes durante el ingreso "para garantizar la seguridad sanitaria en el interior de la prisión, ya que un positivo supondría una bomba de relojería".

Ha pedido que se vuelvan a suspender las comunicaciones tanto vis-vis como por locutorios "ante el incremento de positivos en la ciudad de Melilla".

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