Actualizado 05/03/2016 18:55

Cinco detenidos en Melilla acusados de robo y venta de drogas

MELILLA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Policía Nacional ha detenido en Melilla a un total de cinco individuos, de edades comprendidas entre 22 y 44 años, con ocasión de cuatro intervenciones por presuntos delitos contra la propiedad y tráfico de drogas en los barrios de Huerta Salama, Cabrerizas, Las Palmeras y El Industrial. En concreto, uno de los detenidos fue sorprendido cuando presuntamente robaba un vehículo, otro por vender sustancias estupefacientes, un tercero al estar en "busca y captura" por delitos contra la propiedad y un cuarto que había robado la motocicleta que resultó ser propiedad de un policía nacional.

Según ha informado este sábado un portavoz de la Jefatura Superior de Policía, el primero de estos hechos se ha producido a las 4,30 horas de la madrugada del 3 de marzo en la calle Periodista Francisco Roldán Pérez. Así, ha detallado que los agentes de un indicativo del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) escucharon la alarma de un vehículo estacionado en esta calle y vieron cómo salía "a toda prisa" de su interior un individuo.

Los agentes le persiguieron a pie hasta darle alcance poco después y, tras verificar los daños que presentaba el turismo, procedieron a su detención, ha subrayado. El detenido es un joven argelino de 22 años de edad, cuenta con antecedentes por infracción a la Ley de Extranjería.

VENDEDOR DE DROGAS

Por otro lado, a las 11,00 horas del viernes, los agentes de un indicativo de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), que se encontraba patrullando por el barrio de Cabrerizas, observaron a un individuo al que conocían por ser consumidor habitual de estupefacientes.

El joven mostró voluntariamente a los agentes varios cigarrillos de kiffi, que manifestó llevar para su autoconsumo, informando a los policías del lugar donde los había adquirido.

Dando por ciertos los datos recibidos, se dirigieron hacia la asociación vecinal indicada, donde localizaron a un individuo conocido por anteriores detenciones por tráfico de drogas. En cuanto vio entrar a los policías, se dirigió apresuradamente al cuarto de baño pero, pesar de su intento, los agentes reaccionaron inmediatamente y le interceptaron antes de que pudiera deshacerse de las sustancias que portaba.

En el registro de este individuo, así como del aseo del local, los policías intervinieron cinco trozos de hachís y un total de 50 cigarrillos de kiffi, así como 34 euros fraccionados en monedas y billetes, procedente todo ello, presuntamente, de la actividad de tráfico de droga.

La posterior comprobación de antecedentes del detenido, un marroquí de 44 años de edad, dio como resultado que, bajo las cuatro identidades con las que había sido detenido con anterioridad, le constan diez reseñas por delitos contra la salud pública, robo con fuerza en las cosas e infracción a la Ley de E

ROBO CON FUERZA

Por otra parte, otro indicativo de la UPR que se encontraba patrullando a las 22,00 horas por el barrio de Las Palmeras localizó a un individuo del que sabían estaba siendo buscado por delitos contra la propiedad.

Antes de que pudiera advertir la presencia policial, los agentes se aproximaron desde distintos puntos para impedir toda posibilidad de huida, siendo finalmente detenido. El individuo, un marroquí de 30 años de edad, tenía en vigor dos requisitorias por robos con fuerza cometidos en los meses de enero y febrero de 2016.

LA MOTO DE UN POLICÍA

Finalmente, a las 23,00 horas del viernes, un camarero de un establecimiento situado en el barrio del Industrial alertó a cuatro agentes de la Policía Local que se encontraban en este establecimiento de que acababa de ver a dos jóvenes en una motocicleta. El empleado conocía el vehículo por ser propiedad de un agente de la Policía Nacional que es cliente habitual.

El portavoz de la Jefatura Superior ha explicado que los policías salieron inmediatamente en su persecución y consiguieron interceptar la motocicleta en la confluencia de las calles Alfonso Gurrea y Marqués de Montemar.

Los detenidos son dos marroquíes de 29 y 30 años de edad, que fueron trasladados a dependencias de la Jefatura Superior, y la motocicleta, con diversos desperfectos, ha sido devuelta a su propietario.

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