Actualizado 08/11/2006 12:44

Sucesos.- Los ceutíes detenidos el sábado en Marruecos pasan a disposición judicial sin saberse la acusación

CEUTA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los dos jóvenes ceutíes que fueron arrestados el pasado sábado en un espectacular control policial organizado en la carretera que enlaza la ciudad autónoma con Tetuán fueron puestos ayer a disposición judicial en la capital del antiguo Protectorado español sin que hayan trascendido hasta el momento los cargos que se le imputan ni las circunstancias exactas en las que se produjo su detención, según explicaron fuentes familiares y policiales a Europa Press.

Los allegados de Nordine y Yasin, que esta tarde cumplirán 96 horas detenidos, lamentaron hoy la falta de información a la que han podido tener acceso sobre sus familiares tras desplazarse ayer por la tarde hasta Tetuán, donde los dos jóvenes declararon por primera vez ante el fiscal.

Las familias de ambos han vuelto a negar cualquier relación de los detenidos con el extremismo islámico, como se ha llegado a apuntar por algunas fuentes, y recalcaron que los únicos artilugios que llevaban en su vehículo eran instrumentos para la práctica de la pesca submarina, tal como ayer dijo en una comparecencia ante los medios el delegado del Gobierno en Ceuta, Jenaro García-Arreciado.

La Delegación, a la que las familias piensan recurrir directamente si se mantiene el secretismo actual sobre el caso, negó tener nuevos datos sobre el asunto e insistió en que sus informaciones apuntan a que los ceutíes fueron detenidos después de que la Gendarmería marroquí recibiese una denuncia según la cual se les había visto manipular armas en el maletero de su coche.

Las Fuerzas de Seguridad marroquíes, que no han confirmado oficialmente la detención aún, mantuvieron retenido ayer durante más de cuatro horas al corresponsal del diario El Faro de Ceuta en Tetuán, el periodista Jamal Ouahbi, que había acudido al Tribunal donde iban a declarar los ceutíes para cubrir la información del caso. Ouahbi fue liberado a las 22.00 horas (hora española) tras retirársele todo el material fotográfico que había obtenido.