MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
A pesar de que muchos pensaban que se escaparían fuera de Inglaterra para celebrar su aniversario en alguna isla paradisíaca, lo cierto es que tanto el Príncipe Guillermo como su esposa celebraron su primer año de casados en la campiña inglesa.
Durante el día, los Duques de Cambridge asistieron a la boda de unos amigos en común, Robert Carter y Hannah Gillingham, en Suffolk, al este de Inglaterra. La Duquesa usó un vestido azul de encaje, que ya había lucido durante su visita a Canadá, después de su boda el año pasado.
Después de pasar una agradable velada con sus amigos recién casados, la pareja 'real' se retiró a pasar la noche en un pub del siglo XII llamado 'The Crown' (casualmente 'La Corona') y situado en la misma localidad donde fue la boda.
Tal y como se pueden observar en la página web del encantador refugio, no dispone en absoluto de los lujos de un hotel de cinco estrellas, salvo el de la paz y la tranquilidad de cualquier hotel en la campiña.
Tal y como confirmó la revista 'Hello', los Duques de Cambridge llegaron al hotel alrededor de la una de la madrugada y tomaron una copa de champán en el bar antes de retirarse a la habitación 'Cisne', cuyo precio por noche ronda los 203 euros aproximadamente.
Los empleados del hotel han dicho que actuaron como el resto de huéspedes, y que obviamente no habían dicho quienes eran cuando hicieron la reserva. Gareth Clarke, director del hotel declaró: "Sabíamos íbamos a tener invitados especiales, pero no sabíamos que lo eran tanto".
Después de disfrutar juntos de unas horas de intimidad, los futuros reyes de Inglaterra salieron a desayunar al jardín, donde le acompañaron sus amigos, los mismos que habían asistido la noche anterior, y que seguramente gozarían de una buena resaca.
Clark añadió : "Fue una encantadora reunión familiar en una atmósfera relajada y ambos parecían muy feliz en un ambiente cómodo con sus amigos". Más tarde, los Duques hicieron las maletas para regresar a su casa en Anglesey, donde llegaron a tiempo para una romántica cena.
