MADRID, 1 Dic. (CHANCE) -
La actriz Elisa Mouliaá ha dado un paso determinante en el proceso judicial que mantiene contra Íñigo Errejón, pidiendo la apertura de juicio y solicitando tres años de cárcel y una indemnización de 30.000 euros por un delito continuado de abuso sexual.
En su primera reacción pública tras el auto de procesamiento, la actriz ha defendido que "con el procesamiento se ha demostrado que mi denuncia es cierta, que yo no me he inventado nada" y asegura sentirse respaldada: "Al final he sido buena ciudadana, cualquier ciudadano con ética hubiera hecho lo mismo". Insiste en que la petición de condena "la ha considerado mi abogado y yo apoyo totalmente lo que diga mi abogado. Está todo en manos de la justicia, no tengo nada más que decir".
Mouliaá recalca la dureza personal del proceso: "Después de todo este proceso creo que nadie en su sano juicio puede inventarse algo así, es muy duro", subrayando que los avances en la causa "han callado muchas bocas de los que decían que hacíamos esto por dinero o fama". La actriz reivindica el apoyo recibido por mujeres, hombres, instituciones y medios, y expresa: "He recibido muchísimos mensajes de apoyo, de mujeres y hombres de este país, de políticas y de instituciones gubernamentales, de periódicos... para darme voz y que la justicia salga adelante".
Sobre la dificultad de probar los hechos, Elisa lamenta que "como va a ser juzgado por la anterior ley, probablemente no salga condenado, porque hay que demostrar que hubo intimidación y violencia", aunque agradece que "ya me la ha dado con el procesamiento, que se ha demostrado que he dicho la verdad". Para ella, la prioridad ahora es "acabar con todo esto, recuperar mi vida, y que la justicia esté cada vez más de la mano de las mujeres que denuncian", dejando el ejemplo de que "luchar por la verdad es lo único que merece la pena".
Íñigo Errejón, por su parte, niega los hechos y mantiene que no existen "mínimos indicios" de culpabilidad, recurriendo el procesamiento y reclamando el archivo libre del caso.