MADRID, 21 Jun. (CHANCE) -
Importante última hora sobre la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva. Y es que a falta de poco más de dos semanas para el gran día, Carolina Molas ha tomado una inesperada decisión que afecta directamente a los novios. Tal y como ha adelantado 'Vanitatis' la empresaria -que lleva meses defendiendo su anonimato- va a aparecer en la exclusiva fotográfica del enlace, que su hijo y la marquesa de Griñón han vendido por una suculenta cantidad a una conocida revista, para que todo fluya con normalidad en el gran día.
La futura consuegra de Isabel Preysler quiere vivir el 'sí quiero' como cualquier otro invitado y, teniendo en cuenta que es la madrina y tendrá un papel protagonista, ha comprendido que no tenía sentido alguno que se la pixelase, borrase o cortase del reportaje; después de varias reflexiones, y tras mantener durante un tiempo prolongado su postora de no salir en la exclusiva, ha decidido ceder para disfrutar al máximo de la boda de su hijo.
Una gran noticia para los novios sobre la que le hemos preguntado a Íñigo que, nervioso y tenso en la recta final para su enlace, se ha mostrado desquiciado ante las cámaras. El ingeniero salía de su casa en el centro de Madrid hablando por teléfono, por lo que no le han sentado demasiado bien las preguntas sobre la decisión de su madre de aparecer en la exclusiva.
Muy serio, y sin dar crédito a que la reportera continuase haciendo su trabajo, el 'novio del año' la miraba desconcertado y enfadado, sin confesar si está feliz porque su madre vaya a salir en el reportaje fotográfico de su boda. ¡Dale al play y no te pierdas el desternillante momento!
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