Carlos Hipólito lleva la polémica a la Casa de Alba

Posado de Carlos Hipólito
BEATRIZ VELASCO / EP
Actualizado: viernes, 3 diciembre 2010 12:43

MADRID, 3 Dic. (Por Cristina Tiburón) -

Carlos Hipólito repite con el papel de Jesús Aguirre en la segunda parte de 'La Duquesa'. En esta ocasión el actor será protagonista junto a su compañera de reparto Adriana Ozores, para mostrarnos los 23 años de matrimonio de la pareja.

Carlos Hipólito empezó en el teatro en 1976, un hombre versátil que ha sido intérprete de diversos géneros dramáticos. Le hemos visto en diferentes series de televisión - en 'Cuéntame como pasó' ha participado en 200 capítulos- y entre los directores que han trabajo con él se encuentra José Luis Garci, con el que ha repetido al menos cinco veces y con el que fue nominado al Goya como mejor interpretación masculina de reparto por su papel en 'Historia de un beso'.

Casado con la también actriz Mapi Sagaseta, ambos comparten profesión y una hija en común, Elisa. Inmerso en su trabajo, profesionalmente la vida le sonríe. Tras seis semanas de rodaje terminarán el once de diciembre de grabar esta segunda parte de 'La Duquesa' aunque le podremos seguir viendo en el teatro.

- Esta segunda parte se centra fundamentalmente en el matrimonio de la Duquesa con Jesús Aguirre, ¿qué has hecho a diferencia de la primera para encarnar a la perfección el personaje de Jesús Aguirre?

- A la perfección ojalá, eso está por ver (risas). El desarrollo del personaje ha cambiado porque en la primera parte era esquemático, era muy expositiva. Había que contar mucha historia en poco tiempo y realmente se daban unas pinceladas del arranque de la historia de cómo se conocieron Cayetana y Jesús Aguirre. En esta segunda parte los guiones están en mi opinión muy bien escritos, hay unos guiones muy potentes dramáticamente y que han desarrollado con mucho rigor toda la historia de ellos dos. Para mí como actor el desarrollo de este personaje en este tercer y cuarto capítulo es riquísimo porque me permite pasar por muchos lugares. Hay momentos de humor, de gran dramatismo, de mucha soledad y mucha tristeza y al mismo tiempo de mucho amor entre ellos.

- Contigo llega la polémica a la Casa de Alba porque eres once años menor que ella, ex sacerdote jesuita e hijo de madre soltera ¿cómo se va a vivir tu entrada en la familia?

- Lo que cuenta fundamentalmente esta segunda parte son los veintitrés años de matrimonio hasta la muerte de Jesús Aguirre. Primero vemos cómo esa historia de amor se produce y viven un momento muy feliz, solamente empañado por el rechazo absoluto de toda la aristocracia tanto madrileña como sevillana hacia la figura de Jesús Aguirre. Eso empieza a provocar problemas en el matrimonio, todo añadido al rechazo que también se produce por parte de la familia porque los hijos no aceptan el lugar que este hombre ocupa como segundo padre. Este hombre renunció a muchas cosas de su vida privada y de su forma de vida, de su historia personal para entrar en la Casa de Alba por amor a Cayetana, la Duquesa. Luego hay una etapa en la que él está más crecido sintiéndose más duque que nadie, se vino arriba entre comillas. Pero a medida que va viendo el rechazo que se produce entre el entorno de la sociedad que le rodea a ella, unido a problemas que tuvo cuando fue nombrado comisario de la Expo en Sevilla y posteriormente destituido, hacen que este personaje entre en una depresión y empieza a haber un distanciamiento en la pareja. Siguen queriéndose pero empiezan a no entenderse, los códigos están menos definidos para la relación. Posteriormente este hombre enfermará de un cáncer de laringe que, unido a la depresión que ya padecía, le envuelven en una nube negra que terminará con su fallecimiento.

- ¿Qué enamora a Jesús de Cayetana?

- Yo creo que le enamora lo sorprendente que era para él. Porque era un hombre republicano, además de izquierdas, del PSOE y había sido teólogo. Lo que le enamoró fue lo sorprendente de encontrarse con una mujer que él pensaba que iba a ser una aristócrata banal, superficial y realmente se encontró con una mujer valiente, divertida y que le llamó mucho la atención. La relación al principio empieza con mucho enfrentamiento, hay choque, no se llevan especialmente bien y quizás es eso lo que les atrajo. Así como se dice que a ella le atrajo de él que era un hombre que la hacía reír, además ha dicho en alguna ocasión que a pesar de ser un hombre tan culto y tan inteligente, nunca le hizo sentirse menos inteligente y menos culta que él. Se creó una relación muy potente, ella era muy divertida, alegre, viva y probablemente le pasó a él parte de esa alegría, porque Jesús era un hombre bastante más serio, de estar encerrado en bibliotecas y estudiando todo el día.

- ¿Qué papel ha jugado Cayetana de Alba en esta segunda parte que ha supervisado los guiones?

- Los guiones los conoce y parece que le han debido de gustar mucho porque ha sido muy amable y nos ha abierto las puertas del Palacio de Dueñas en Sevilla y del Palacio de Liria en Madrid, algo que para todo el equipo de rodaje ha sido un privilegio absoluto el tener acceso a rodar en esos lugares. Primero porque eso le da una verosimilitud a la serie impresionante porque el público va a poder conocer parte de su historia, los lugares donde vive que son unos palacios maravillosos, y que ningún decorado podría reconstruir con toda la grandeza que tienen. El papel que ha jugado es de estar muy a favor de la historia y de la producción, ha dado muchas facilidades. Incluso en el Palacio de Dueñas donde estuvimos rodando la primera semana, aunque yo no tuve ocasión de saludarla porque no estaba, ella bajó a saludar a todo el equipo, estuvo muy amable y todo el mundo estaba encantado de saludarla.

- En la primera parte hubo cosas con las que ella no estaba de acuerdo, ¿no?

- En este caso ella ha puesto pegas muy superficiales, en ningún momento ella ha estado en contra del fondo de la historia ni de cuestiones de fondo en el sentido de cómo se han enfocado los personajes. Simplemente ella ha dicho cosas como que sus criados nunca llevaron cofia, pero para el rodaje quedaba más bonito que las criadas la llevaran, o que ellos eran más rubios. Son comentarios que cualquiera podríamos hacer, pero en el fondo realmente creo que le gustó lo que vio y de hecho su actitud actual lo demuestra.