Una fábrica de estrellas que asegura la vitalidad de nuestra galaxia

Fábrica de estrellas
ESA/HERSCHEL/PACS, SPIRE/HI-GAL PROJECT
Actualizado: martes, 31 mayo 2016 19:21

   MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

   Las nuevas estrellas son el alma de nuestra galaxia, y hay suficiente material en esta imagen del telescopio Herschel de la ESA para producir estrellas durante millones de años.

   Situada a 8.000 años luz de distancia en la constelación de Vulpecula, el área de la imagen se conoce como Vulpécula OB1. Se trata de una "asociación estelar", donde un lote de verdaderamente gigantes estrellas "OB" está naciendo. Las estrellas O y B son las estrellas más grandes que se pueden formar.

   Las estrellas gigantes en el corazón de Vulpecula OB1 son algunas de los más grandes de la galaxia. Con decenas de veces la masa del Sol, tienen una vida corta, astronómicamente hablando, porque queman su combustible rápidamente, informa la NASA. Con una edad de dos millones de años, ya han experimentado parte de su vida útil. Cuando el combustible se agote, colapsarán y explotarán como supernovas. El choque que esto producirá a través de la nube que la rodea, disparará el nacimiento de incluso más estrellas, y el ciclo comenzará de nuevo.

   Las estrellas O son al menos 16 veces más masivas que el Sol, y podrían tener más de 100 veces su masa. Son de 30.000 a 1 millón de veces más brillantes que el sol, pero sólo viven unos pocos millones de años antes de explotar. Las estrellas B tienen de dos a 16 veces la masa del sol. Pueden ser de 25 a 30.000 veces más brillantes que el sol.

   Las asociaciones OB son áreas con colecciones de estrellas O y B. Como estas estrellas tiene una vida tan corta, encontrarlas en cantidades amplias indica que el área debe ser un sólido reservorio de formación de estrellas, que incluirá muchas estrellas más pequeñas que van a sobrevivir mucho más tiempo.

   Las grandes cantidades de luz ultravioleta y la radiación emitida por las estrellas está comprimiendo la nube circundante, haciendo que las regiones cercanas de polvo y gas comenzarán a colapsar en más nuevas estrellas. Con el tiempo, este proceso se 'comera' su camino a través de la nube, transformando parte del material en nuevas estrellas brillantes.